Este lunes 3 de junio el colectivo Ni Una Menos cumplió cuatro años y las calles de todo el país se llenaron de mujeres que protestaron contra la violencia machista, los femicidios y le reclamaron al Estado nuevas políticas públicas con perspectiva de género.
En Santa Fe, la concentración fue en la sede regional de Anses, en plena peatonal. El lugar fue elegido para protestar por el fin de la moratoria que permitió que muchas amas de casa puedan acceder a una jubilación. Luego, una multitud marchó hacia Plaza 25 de Mayo, donde se realizó el acto central y, como cada año, se leyó un documento.
Silvina Sierra, de la Mesa Ni Una Menos Santa Fe manifestó que "el Estado es responsable por no asegurarnos vivir tranquilas en nuestros hogares, que es lugar en donde más peligro de vida corren las mujeres. Salimos a repudiar esto, a seguir exigiendo al Estado políticas públicas para todas las mujeres; a la justicia también, para que los trámites sean más ágiles y fáciles para que las mujeres puedan denunciar y también que las sepa escuchar. Porque muchas veces a las mujeres no se las sabe escuchar. Vinimos también por las desaparecidas por las redes de trata, como Natalia Acosta, y por tantas otras mujeres que queremos que busquen".
Agregó que también se marchó por "la jubilación de las amas de casa, el fin de la moratoria previsional, que ha beneficiado a tantas amas de casa en los últimos años, queremos que esto siga, es un derecho que nos están sacando, por eso venimos a reclamar que no sea así". "Queremos que los políticos y políticas, ahora que están cerca de una elección se hagan cargo. Santa Fe es la segunda provincia con más femicidios, esto habla de que hay algo que está fallando, es necesario que el poder político se replantee esto para ver qué medidas se pueden tomar", concluyó.
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Por su parte, Dolores Báez, mamá de Verónica Ramírez -víctima del doble femicidio de Punta Norte- expresó que nunca pensó que iba a estar así, "nunca pensé que me iba a faltar un hijo y una nieta. Me siento contenta por estar rodeada de tanta gente pero mi corazón está triste, me arrancaron una parte, queremos justicia".
"Estoy confiada en que se va a hacer justicia. Todos en el barrio se unieron a mí, todos queremos justicia. Se hicieron muchas denuncias, mías, de mi ex yerno, de mi nieto, y él la obligaba a retirarlas". "Queremos que se conozca todo, no queremos nada más que justicia", finalizó.
