No es exactamente El Día de la Marmota, la película protagonizada por el genial Bill Murray, estrenada hace más de veinte años, pero después de 150 días se le parece bastante. Por eso los expertos que se reunieron hoy en la residencia de Olivos con el Presidente al mediodía aconsejaron dejar de hablar de cuarentena y poner el foco en la necesidad de cuidados, dando a paso a una nueva etapa sanitaria, evitando que se repita un escena que ya no genera buenas expectativas en la población.
A la Quinta Presidencial acudieron los infectólogos Pedro Cahn y Gustavo Lopardo, el psiquiatra Santiago Levin, la psicóloga Alicia Stolkiner, el cientista social Juan Piovani, el cardiólogo Javier Farina y la ex presidenta de la Organización Panamericana de la Salud, Mirta Roses, quienes coincidieron en transmitir: “Evaluamos de manera muy positiva la estrategia sanitaria del Gobierno nacional”.
Y, según trascendió de fuentes oficiales, fueron muy críticos con “afirmaciones catastróficas expresadas por algunos profesionales de la salud mental”. Claro que aceptaron que existen “efectos psicológicos por la pandemia, pero hay un camino en el medio” que requiere otro tipo de mensajes, otro tipo de comunicación. En concreto, la cuarentena continúa pero hay que comunicarla distinto, haciendo “mucho hincapié en la necesidad de mayor cuidado y de perspectiva temporal” para lo cual “la vacuna abre una oportunidad única”.
Antes de ese encuentro, el grupo de asesores científicos mantuvo una reunión virtual coordinada desde el Ministerio de Salud por Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud. Y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, se fue antes de la reunión de Gabinete Federal que comenzó a las 10 en la Casa Rosada para acompañar al Presidente en el encuentro con el comité de expertos.
Por la tarde, a partir de las 17:30, está previsto el encuentro que Alberto Fernández compartirá con Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta, de quienes espera un acuerdo acerca de cómo llevar el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) por las próximas dos semanas, aunque también podría haber novedades. Mañana se hará el anuncio oficial, pero todavía no está decidido el formato ni a qué hora será.
“No hay más ASPO ni DISPO en la Argentina”, vienen declarando distintos funcionarios nacionales en los últimos días, dando cuenta de que el aislamiento y aun el distanciamiento ya no son una forma de ordenamiento de la apertura de actividades en distintas regiones del país. También, de que lo que en el AMBA se denomina “cuarentena” ya no es una realidad que pueda ser respetada en prácticamente ningún distrito, salvo en los que tienen alta difusión pública.
Incluso hoy por la mañana lo dijo el empresario argentino Hugo Sigman, especialmente ponderado en estas horas por haber logrado para la Argentina la posibilidad de fabricar la vacuna de la Oxford University, desarrollada por el laboratorio AstraZeneca y que será producida entre el laboratorio argentino mAbxience y el mexicano Liomont para toda América Latina. Desde Madrid, en diálogo con Radio Mitre, explicó que “en todas partes del mundo, después de tantos días, la gente le tiene más miedo a la cuarentena que al coronavirus”.
Cerca del Presidente, sin embargo, no pudieron adelantar los planes. “Alberto es bastante hermético en cuanto a sus planes al respecto, tomó nota de que en las encuestas la mayoría quiere continuar con los cuidados pero dentro de un esquema flexibilizado, pero sigue bastante asustado por el famoso pico, que nunca se sabe a ciencia cierta cuándo llegará”, explicaron.
Todo indicaría, entonces, que las restricciones continuarán con mínimas flexibilizaciones en la zona del AMBA, con vueltas atrás en algunos distritos del interior y el anuncio de mayor capacidad de camas de terapia intensiva, tanto en CABA como en el Conurbano, para las que ayer viajó especialmente el ministro de Salud, Ginés González García, en un plan que seguirá en pleno desarrollo durante el mes próximo.
Ayer mismo, en la conferencia de prensa donde Fernández anunció que el acuerdo entre privados logrado para producir la vacuna que –hasta ahora– viene más avanzada con los pasos de prueba establecidos por la OMS, insistió con que “es un gran alivio para el futuro, pero no una solución para el presente”, porque “seguimos teniendo los mismos problemas con el número de contagios y los fallecimientos que crecen”.
Y se quejó de que le sigan hablando de cuarentena. “La gente sale con barbijos, algunos respetan la distancia social, los negocios están abiertos y la actividad comercial en el AMBA es muy amplia hoy en día”, expresó, sin ocultar la preocupación que le genera el futuro inmediato en materia de salud.
Fuente: Infobae