Winston Howes vivió tres décadas de feliz matrimonio junto a su esposa Janet, pero el destino truncó su felicidad cuando, en 1995, ésta falleció por una insuficiencia cardíaca, dejándole sumido en una profunda tristeza.
Tras la desgraciada pérdida, Howes decidió que debía hacer un último homenaje a su mujer y lo hizo de la forma más espectacular: creando un bosque con forma de corazón.
Aunque su bonita dedicatoria permaneció oculta durante 17 años, para Howes fue la mejor forma de decirle adiós a Janet. Tiempo después de su creación, el piloto de globos aerostáticos Andy Collet descubrió el bosque con forma de corazón durante un viaje aéreo por South Gloucestershire, en Inglaterra.
Así lo afirman en el blog Guff, donde relatan que el piloto quedó prendado de este gesto tan emotivo. “Era lo más impresionante que jamás había visto desde el cielo. Un corazón perfecto escondido de la vista. Desde tierra nunca podrías imaginar que está ahí”, dice Collet asombrado.
El piloto sacó a la luz el impresionante bosque con forma de corazón con una serie de fotografías que ya han dado la vuelta al mundo y que han provocado una gran curiosidad entre los internautas, deseosos de conocer la identidad del autor del homenaje y de su amada. Howes, tras salir su historia a la luz, declaró a los medios que plantó miles de robles para homenajear a su esposa fallecida. Después, plantó narcisos en el centro, para que la imagen fuese mucho más bella en primavera.
Además, el autor del bosque afirma que el corazón, sólo accesible a través de una pequeña pista, apunta hacia Wotton Hill, el lugar de nacimiento de Janet. Todo un homenaje, que hoy en día se ha convertido para Howes en un santuario donde recordar a su esposa.
