El nombre de Ashok Chandwaney, hasta ahora desconocido en la escena pública, consiguió notoriedad esta semana al renunciar a Facebook y publicar una carta en la que critica duramente a la compañía que dirige Mark Zuckerberg. El ingeniero, de 28 años, acusa a la red social de “hacer dinero gracias al odio”.
“Renuncio porque no puedo seguir contribuyendo a una empresa que está lucrando con el odio en Estados Unidos y en el mundo”, escribió. “Parece que Facebook no encuentra ningún valor de negocio en adoptar estrategias para eliminar el contenido de odio en la plataforma”, añadió en una carta en la que repaso una serie de hechos específicos que motivaron su salida.
El experto en software menciona el reciente fracaso de la red social para eliminar un evento publicado en la plataforma en la que un grupo de milicianos alentó a ejercer violencia contra manifestantes en Kenosha, Wisconsin. Chandwaney también refirió a la decisión de Facebook de no borrar un posteo de Donald Trump en el que dijo “cuando empieza el saqueo, empieza el tiroteo”.
En relación a aquella publicación, y en el marco de la divulgación de una orden ejecutiva en la que Trump exige que las redes sociales se hagan cargo del contenido que aparece en sus plataformas, Zuckerberg manifestó que “Facebook no debería ser el árbitro de los que es verdad en todo lo que diga la gente en línea”. De esa forma, la mencionada publicación del presidente estadounidense no fue borrada tal como, por caso, sí ocurrió en Twitter.
“Continuaremos señalando la información incorrecta o engañosa sobre elecciones en todo el mundo. Y seguiremos admitiendo los errores que podamos tener. Eso no nos convierte en ‘árbitros de la verdad’”, contraatacó Jack Dorsey, CEO de Twitter.
Siguiendo a The Washington Post, medio que accedió a la carta de renuncia de Chandwaney, varios empleados de la firma californiana dimitieron en los últimos meses por razones similares. En ese contexto se acumulan las críticas hacia Facebook, especialmente entre los demócratas estadounidenses. Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes y miembro del Partido Demócrata, acusó al director ejecutivo de Facebook de complacer a Trump.
En esa línea, reportes recientes señalaron que la mayor red social de Internet permitió intencionalmente la desinformación, relajando sus políticas de moderación, para frenar las críticas de los conservadores en Estados Unidos.
La misiva del ingeniero saliente fue publicada dentro de la propia red social a la que renunció y además la compartió en una plataforma interna que utilizan los trabajadores de la compañía.
“He escuchado numerosas explicaciones, todas insatisfactorias, sobre cómo muchas de las cosas en las que he trabajado han aportado valor social”, comentó Chandwaney y concluyó que “al final del día, todas las decisiones se adoptaban sólo estaban pensadas hacia el valor del negocio”.
“Color of Change está encantado de respaldar a Chandwaney, pero es una vergüenza que los empleados necesiten marcharse a organizaciones para proteger comunidades de color antes que poder acudir a sus propios empleadores”, dijo Rashad Robinson, presidente de aquel grupo activista que ha presionado a Facebook para que adopte medidas más eficientes para restringir el discurso de odio. “Necesitamos que más empleados de Facebook se expresen. Necesitamos más gente de Facebook para presionar más”, alentó.
La respuesta de Facebook
“No nos beneficiamos del odio”, aseguró la vocera de Facebook Liz Bourgeois en declaraciones de la fuente mencionada.
“Invertimos miles de millones de dólares cada año para mantener a nuestra comunidad segura y estamos en una asociación profunda con expertos externos para revisar y actualizar nuestras políticas. Este verano lanzamos una industria política líder para perseguir a QAnon, que hizo crecer nuestro programa de verificación de hechos y eliminó millones de publicaciones vinculadas a organizaciones de odio, más del 96% de las cuales encontramos antes de que alguien nos las denunciara”, señaló.
Fuente: tn.com.ar
