Un automovilista que había estacionado su auto en Santiago del Estero entre San Martín y San Jerónimo, se encontró a su regreso con que le faltaba la chapa patente al vehículo.
Ante la situación, el cuidacoches le manifiesta que la patente se había caído y que la tenía un hombre en Alto Verde que volvería a una hora convenida a devolvérsela.
Este supuesto hombre nunca llegó a la cita y fue el propio cuidacoches quién se presentó con la chapa patente y le solicitó el pago de $500 para devolvérsela.
La sospecha firme es que la chapa fue retirada del automóvil - por las marcas que quedaron en el vehículo - ; que ese hombre que la "encontró" no existe y que estamos ante una nueva maniobra del cuidacoches para extorsionar a automovilistas.
