El costo de vida cerrará este año en el 36%, estimó hoy un informe de la consultora Ecolatina.
El índice de precios Gran Buenos Aires elaborado por esa entidad trepó 4,3% entre la primera quincena de noviembre y el mismo período de octubre.
Esta dinámica todavía contempla el incremento en precios máximos, que impulsó el índice durante el transcurso de octubre.
Sin embargo, el aporte de equipamiento del hogar, alquileres e indumentaria también es significativo.
"Prevemos que la inflación nacional se ubique en la zona de 3,5-4% en noviembre, en línea con ocurrido en octubre producto de una aceleración del IPC Core, condicionando las posibilidades de una desaceleración en el corto plazo", indicó.
Dijo que "la eliminación de algunos precios máximos en alimentos no básicos se combinará con aumentos en el resto de bienes no esenciales y con algunos servicios privados en los próximos meses".
"Considerando que las negociaciones paritarias volverán a pautarse, de mínima, a principios del próximo año, lo más probable es ver una continuidad en el deterioro del poder adquisitivo", señaló la entidad.
Lorenzo Sigaut Gravina, director de Ecolatina, dijo que la inflación "comenzó a acelerarse de la mano de las menores restricciones a la circulación, pero también producto del menor alcance del programa de precios máximos, así como el ajuste de algunos precios Regulados, como combustibles y prepagas".
Consideró "lógico que, tras un período de congelamiento, la inflación se acelere puesto que en el pasado la suba de precios fue menor gracias a dicha medida, pero mantenerlo fijos no se puede sostener por mucho tiempo".
"Hacia adelante la clave para que la inflación vuelva a desacelerarse pasa por estabilizar el frente cambiario: las escasas reservas netas y la elevada brecha muestran que la probabilidad de un salto cambiario no es despreciable", explicó.
Fuente: NA