Cuando Nancy Sánchez se recuperó de la anestesia después de dar a luz, se encontró un corte en el abdomen que no era producto del parto. Cuenta a France 24 que, cuando preguntó a los médicos, esta fue su respuesta: "Ya se le ligó, el Gobierno no está para mantener a mucha gente".
A Nancy le habían hecho un ligamiento de trompas, un procedimiento de esterilización que evita futuros embarazos. Era 1999 en Perú y el presidente era Alberto Fujimori, ahora acusado de ser el responsable de miles de esterilizaciones forzadas, era el presidente del país.
Esta semana inició el juicio contra el expresidente, un juicio virtual que busca esclarecer su responsabilidad en estas vulneraciones de derechos humanos, y que también enjuician a tres de sus ministros de Salud y otros responsables gubernamentales de la época.
Como si hubiera escuchado las palabras que le dijeron los médicos a Nancy hace más de 20 años, el fiscal Pablo Espinoza denunció que Fujimori esterilizó a mujeres andinas para "reducir la pobreza" durante la sustentación de cargos contra el exmandatario y los demás funcionarios.
Según la Fiscalía y numerosas víctimas, Fujimori impulsó un programa de esterilizaciones que supuestamente debía ser voluntario, pero a través del cual imposibilitó el embarazo a mayoritariamente a mujeres, aunque también a hombres, sin su consentimiento. La mayoría de víctimas eran campesinas, con pocos recursos y quechuablantes.
Las víctimas podrían ascender a 270.000, o incluso más, aunque el juicio está basado en los testimonios de 1.300 personas que sufrieron lesiones graves a causa de la esterilización y cinco que murieron.
El plan, llamado Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar, fue impulsado entre 1996 y 2000, cuando Fujimori dejó definitivamente el poder.
Además de Fujimori, también son juzgados los exministros de Salud Eduardo Yong, Marino Costa y Alejandro Aguinaga, junto con el exdirector de Salud Ulises Aguilar. El fiscal Espinosa subrayó que todos "hicieron mucho daño con su política" al "jugar con las vidas y la salud reproductiva de las personas".
Fujimori no acudió al juicio, que se celebraba de manera virtual, sino que lo hizo en su nombre el abogado César Nakazaki, ya que sostiene que no debería ser procesado por este caso porque no lo incluyeron en su expediente cuando fue extraditado de Chile.
Fujimori ya cumple una condena de 25 años de cárcel por abusos a los derechos humanos durante su Gobierno.
Fuente: EFE