El grupo de integrantes de Comunidad por la Naturaleza decidió, tras 10 días de acampe de protesta, decidieron levantar el cordón humano en el ingreso a la obra del aulario de la UNL, sobre la Costanera Este, luego de no haber conseguido de esta manera respuesta alguna por parte de la provincia. Lo que solicitan a través de esta acción es rever la categorización y ubicación de la mencionada construcción. Esta mañana se manifestaron frente al Rectorado y sostienen que seguirán buscando alternativas para visibilizar el reclamo.
Andrea Previtali, integrante de Comunidad por la Naturaleza, expresó a Veo Noticias cuáles son sus preocupaciones: "Nosotros estuvimos sosteniendo un cordón humano para impedir que siga avanzando la obra, y que se pusiera el concreto. Fue una situación de que produjo mucho desgaste para la comunidad por la naturaleza y también descubrimos que eso también violaba los derechos de los trabajadores de la construcción que tienen derecho a un trabajo digno. Por lo tanto decidimos desde la condición de que tenemos evaluar todas las estrategias de comunicación, de visibilización del problema".
A partir de ahora, según indicó Andrea, diversificarán las acciones: "hoy estuvimos llevando adelante una manifestación que cobra otra dimensión porque es enfrente de las autoridades de la UNL que son los que tomaron la decisión de llevar adelante una construcción, en ese ecosistema que integra la reserva ecológica".
"Estamos buscando otras instancias de visibilización que lleguen a un mensaje más amplio de la sociedad para darle la oportunidad a todas las personas que les importa que la naturaleza no sea atropellada de esa manera", añadió.
Desde la agrupación sostienen que el gobierno debe realizar un estudio de impacto ambiental y afirman que cuentan con más de 10.000 firmas que apoyan esta causa. Además explicaron que las autoridades no les brindan respuestas.