En la mañana de este miércoles, se realizó en Tribunales la audiencia premilinar de juicio por la muerte de Antonella Olmedo, ocurrida en septiembre de 2015 a raíz de la explosión en la panadería en la que trabajaba, ubicada en J.J Paso y 4 de Enero.
La misma pasó a un cuarto intermedio hasta febrero y allí los abogados defensores de Nicolás Colella, dueño panadería, y Gustavo Arregues, propietario del drugstore, pidieron el sobreseimiento. Mientras que el resto solicitó la probation. En tanto, la Fiscalía y la querella coincidieron en solicitud de ir a juicio oral y público
Tanto el fiscal Andrés Marchi, como la mamá de Antonela, Marcela Olmedo, manifestaron no aceptarán esta propuesta. "Quiero justicia de verdad", manifestó Marcela.
El juez José Luis García Troiano analizará lo solicitado por las respectivas defensas y tomará una decisión, que será conocida en febrero, tras la feria judicial.
Jorge Olmedo, tío de Antonella, manifestó en el móvil de Veo Noticias que la audiencia se interrumpió "porque uno de los imputados pidió la absolución meses atrás y nunca se comunicó esto ni a la Fiscalía ni a la querella". Además hubo pedidos de probation de otros de los imputados. Desde la familia se sienten conformes porque por lo menos comenzó esta audiencia, que tuvo que suspenderse anteriormente por la presentación de una nueva querellante. Indicó que van a insistir con el pedido de llegar a juicio oral y público.
EL CASO
El 13 de septiembre de 2015 se produjo una explosión en el local comercial que dejó a Antonella con el 65% de la superficie corporal con graves lesiones que le provocan la muerte un mes después del siniestro.
La causa tiene a Nadia "Nacha" Sánchez, encargada de la sucursal; Nicolás Colella, dueño de la panadería; Martín Wexler, propietario del local; y Gustavo Arreguez, quien tenía un maxikiosco lindante a la panadería. Los cuatro fueron imputados por "estrago culposo calificado por el resultado de muerte", en una audiencia desarrollada en la sede del Ministerio Público de la Acusación en agosto del 2016.
El 2 de julio de este año, una nueva víctima que sufrió heridas más leves, se presentó como querellante en la causa.