El presidente Alberto Fernández participó de manera virtual en la Cumbre por la Democracia, organizada por su par de los Estados Unidos, Joe Biden, en la que criticó el "aval" que la Organización de los Estados Americanos (OEA)" le dio al golpe en Bolivia y afirmó que la democracia "es el mejor es la mejor garante de la paz".
"Democracia supone no intervención. La democracia es la mejor garante de la paz, la democracia no se impone ni con sanciones ni se impone por la fuerza. La democracia es como la paz, no se exporta. La democracia tampoco se impone", expresó Fernández en su intervención grabada, acompañado por el canciller Santiago Cafiero.
El discurso del jefe de Estado argentino en el encuentro de dirigentes organizado por Washington estuvo dirigida a destacar el valor de la democracia en la región latinoamericana destacando la posición de "no intervención" extranjera sobre los procesos nacionales.
En su alocución a través de un mensaje grabado, Fernández agradeció -en primera instancia- a Biden por la invitación al foro y a la comunidad internacional por la reciente designación de Argentina para presidir el Consejo de Derechos Humanos en la Organización de las Naciones Unidas.
Asimismo, Fernández dijo que en Latinoamérica se está viviendo "un proceso singular, donde muchos países del continente van cambiando sus gobiernos y los procesos democráticos se van consolidando".
Acto seguido hizo expresa mención del Golpe contra Evo Morales en septiembre de 2019 y apuntó contra el aval internacional que recibió el proceso encabezado por Jeanine Áñez.
"Bolivia ha padecido un golpe avalado por gran parte de la comunidad internacional y por la Organización de los Estados Americanos (OEA), y pudo recuperarse y recuperar la democracia y hoy en día tiene vigencia plena la institucionalidad allí. Rescato eso, esa realidad de Bolivia en este día donde la democracia nos convoca, porque tal vez Bolivia sea hoy un buen ejemplo de la importancia de la democracia", afirmó.
El caso de ese país es de especial atención para el presidente Fernández ya que, siendo candidato a la primera magistratura, inició gestiones para rescatar a Evo Morales que, según ha comentado en otras instancias, fueron rechazadas por el entonces mandatario argentino, Mauricio Macri.
El 12 diciembre de 2019, tan sólo dos días después de haber asumido, el Gobierno de Fernández le otorgó asilo a Morales y a cuatro ex funcionarios del Gobierno de Bolivia. Unos meses más tarde se impulsó una investigación sobre el posible envío de armas desde Argentina a La Paz para que fueran utilizadas por las fuerzas golpistas en la represión de las movilizaciones contra Añez.
Bolivia fue señalado por Fernández ante el foro como "un buen ejemplo de la importancia de la democracia", no fue siquiera "invitada" a participar del encuentro, según la lista publicada originalmente en el sitio del Departamento de Estado de la nación anfitriona.
En su mensaje, el mandatario argentino dijo que la democracia es "por sobre todas las cosas diálogo y ese diálogo hay que asumirlo en un ámbito de convivencia y esa mejor convivencia se valida día a día".
"Trabajemos para que la democracia sea el mejor garante de la paz mundial", cerró su discurso Fernández.
El Presidente había sido invitado a participar el pasado 9 de noviembre mediante una carta en la que Biden reconocía el acompañamiento de la Argentina "en la labor para construir sociedades democráticas respetuosas de los Derechos Humanos que es lo que permite prosperar a nuestros ciudadanos".
Joe Biden alertó durante la apertura del encuentro, que fue el jueves, sobre los "alarmantes retos" a los que se enfrenta la democracia en el mundo y llamó a "actuar" para defenderla al inaugurar desde la Casa Blanca la Cumbre de la Democracia, un evento virtual que reúne a más de un centenar de países, entre ellos la Argentina.
"A la luz de los alarmantes y sostenidos desafíos a los que se enfrenta la democracia y los Derechos Humanos universales, la democracia necesita paladines", indicó el mandatario al abrir ayer el encuentro organizado por su país que generó controversia al no invitar a China y Rusia, ni a ocho países latinoamericanos.
Biden, quien asumió el cargo en enero en medio de la mayor crisis política de Estados Unidos en décadas, dijo que las tendencias "apuntan en gran medida en la dirección equivocada".
"La democracia no ocurre por accidente. Tenemos que renovarla cada generación", aseveró acompañado por el secretario de Estado, Antony Blinken.
Fuente: Minuto Uno