Luego de cinco meses consecutivos de contracción, los mejores niveles de molienda y las exportaciones del agro dieron un impulso a la economía santafesina, logrando una mínima variación mensual positiva de +0,02%. Así lo indica el informe del Centro de Estudios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, se preguntan si estos datos se deben al efecto del dólar soja.
"La tasa de cambio interanual del ICASFe se ubicó en 0,7%, por debajo de las bandas de confianza de crecimiento promedio de largo plazo de la economía santafesina. En este sentido, no se observan variaciones significativas respecto al rumbo contractivo que viene mostrando el indicador en los últimos meses.
Sin embargo, los resultados obtenidos en el análisis dejan entrever un efecto de derrame positivo por parte del sector molinero y del sector agroexportador, que permitieron una leve mejora en la medición de noviembre. Al respecto, y a pesar de la sequía que atraviesa la región, los incentivos generados por el Gobierno bajo el mecanismo de operatoria preferencial para los exportadores de oleaginosas, dieron impulso a la venta de stocks de la campaña precedente y colaboraron especialmente con la economía local, eje del polo agroexportador del país.
En relación a las expectativas, tampoco se suma información que contrarreste un escenario complejo. Puede que las liquidaciones de diciembre continúen moderando la situación en el corto plazo, pero el entorno global de las cadenas productivas se encuentra en una situación delicada. Adicionalmente el contexto macroeconómico no logra fortalecerse, lo cual, definitivamente, no colabora con la situación climática y la retracción que ya venían mostrando otros sectores económicos relevantes", sostienen.