A partir de las voluntades que pudo nuclear y torcer, La Libertad Avanza tiene fecha para sancionar por primera vez una iniciativa parlamentaria. La sesión por la ley Bases y el paquete fiscal iniciará el próximo jueves a las 12 horas pero puede terminar el viernes a la madrugada.
Será entonces, con todo el segundo semestre por delante, que Javier Milei tendrá las herramientas para el desarrollo pleno de su plan económico. Sin embargo, sobrevive en él -y principalmente en los gobernadores- la inquietud por la recomposición del impuesto a las Ganancias.
Diputados ajustan detalles para la sesión por la ley Bases
En las primeras intervenciones del plenario de comisiones, quedaron establecidos los contrastes en las posiciones de la ley Bases. Gabriel Bornoroni, presidente del bloque libertario, confirmó que ratificarían el texto aprobado en el Senado, moción que contó con el acompañamiento de radicales, federales y el PRO.
El siguiente orador fue Germán Martínez, titular del peronismo en Diputados: adelantó el rechazo unánime de su bloque y mencionó el reparto de cargos a cambio de votos, las negociaciones paralelas en departamentos, las sesiones en medio de la represión policial e incluso un porvenir de intervenciones judiciales por sobre lo aprobado, ya que el Gobierno apunta a insistir con tramos del paquete fiscal que el Senado rechazó: Ganancias y Bienes Personales.
Este último punto es el de mayor inquietud para el Gobierno, que no tendrá inconvenientes en aprobar con mayoría simple la ley Bases.
Después de una sesión en la que se prevé una extensa introducción (unas cinco horas de mociones de privilegio y el recambio de dos bancas en el Frente de Izquierda, tras los reemplazos de Romina del Plá y Myriam Bregman) esperan tener intervenciones escuetas de representantes de cada bloque y sancionar el documento que incluye el RIGI, la privatización de seis empresas, una reforma previsional y laboral, facultades excepcionales para el Presidente, entre otras transformaciones.
Sin embargo, el debate más desafiante, controversial y dilatado será el de las tres modificaciones que Diputados insistirá como parte del paquete fiscal: impuesto a las Ganancias, Bienes Personales y gastos tributarios.
Allí se hará mención al artículo 81 de la Constitución Nacional: “Ningún proyecto de ley desechado totalmente por una de las Cámaras podrá repetirse en las sesiones de aquel año”. La interpretación de esa reglamentación será material de discusión dentro del Parlamento y en posteriores instancias judiciales.
Reforma fiscal: últimas horas de negociaciones
La mayoría en la Cámara de Diputados se obtiene con 129 votos: en este momento, esa es la cantidad de legisladores que votarían a favor de la recomposición de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias. Si un parlamentario se ausenta o no está al momento de la votación, la aprobación se cae.
“Estamos trabajando entre los que se abstienen para que acompañen”, dijo un parlamentario de Hacemos Coalición Federal, que pronostica mayor margen para el régimen de Bienes Personales y la reforma de gastos tributarios.
En el radicalismo existen mayores dudas. Una referente del bloque aseguró “cuatro de los ocho diputados que votaron en contra de Ganancias en abril, el jueves se van a abstener o van a votar a favor por pedido de los gobernadores”.
Minutos después, uno de los legisladores que integra ese grupo de ocho reconoció para Ámbito que algunos representantes están preocupados por las finanzas provinciales pero que él no cambiará de postura y que dentro de la UCR “se pueden sumar más para el rechazo jueves”. Indecisión dentro de una bancada fundamental que en cada sesión habilita la libertad de acción.
La voluntad patagónica, finalmente, no podría torcer el rumbo de Ganancias. Los diputados sureños de La Libertad Avanza y el PRO -con el único interrogante de la chubutense Ana Clara Romero- sostendrían la postura de aprobación de abril y los representantes de otros bloques ya contaban dentro de la insuficiente negativa.
Nuevamente, la definición quedará en mano de los concebidos como dialoguistas. "Milei se mandó una cagada porque votó esto con Sergio Massa y ahora nos está pidiendo que resolvamos sus cagadas", plantean desde la bancada radical.
Desde Unión por la Patria definieron reiterar la oposición pero aseguran: "Ya es ley. En esta ocasión, ya decidieron ser amigos de Milei". El jueves, cada partido tiene objetivos propios pero todo avanza para que ambos pronósticos se concreten.
Fuente: Ambito