Bruno Securo es titular de un corralón de la ciudad de Santa Fe. De a poco, gracias casi exclusivamente a la baja de la inflación en general, las ventas comenzaron a repuntar y mejorar.
En ese sentido, el comerciante explicó que “en este último tiempo se incrementó la venta, recuperamos un poco el número de 2022 para atrás, pero así y todo falta para equilibrar la balanza. No llegamos al nivel máximo de ventas pero sacamos camiones a la calle, tenemos la flota y los choferes completos. En su momento tuvimos que reducir gastos”.
Luego el dueño del comercio manifestó que “justo para esta época del año pasado el dólar explotó y las ventas aumentaron, salieron a vender los dólares y compraban materiales, ampliaban, hacían viviendas, piletas, el quincho, no viajaban al exterior pero acomodaban la casa”.
En la continuidad del balance, explicó que “entre marzo y junio fueron meses muy duros. Hoy, aparte de que la inflación bajó, hay precios que se desinflaron, habían sido inflados por precaución. Hay productos que bajaron hasta un 40%, es increíble”.
Securo contó lo que había pasado en la última parte de 2023 y primera de 2024: La parte minorista se afectó más: el que quería cambiar la puerta, arreglar el techo, reparar el lavadero, el cuarto de arena y los pocos ladrillos habían desaparecido por completo, nadie compraba” mientras que “ahora cambió, entre agosto y noviembre son los mejores meses, ojalá sigan subiendo las ventas”.