El Gobierno de la Provincia de Santa Fe continúa implementando los narcotest sorpresivos y periódicos a funcionarios del Ministerio de Justicia y Seguridad y a miembros de las fuerzas. Durante la última jornada, el operativo se centró en 35 agentes de la Policía de Investigaciones (PDI) en la ciudad de Rosario, arrojando resultados negativos en todos los casos.
Georgina Orciani, secretaria de Coordinación Técnica y Administración Financiera del Ministerio, destacó la relevancia de aplicar estos controles en el área de investigaciones. Señaló que “se trata de un sector muy ligado a la lucha contra el narcotráfico”.
“Predicar con el ejemplo”
La funcionaria enmarcó los testeos como una política de transparencia activa. “Es una forma de predicar con el ejemplo. Lo que buscamos con esto es desnudar una realidad: nuestro país y nuestra provincia no están exentas de los consumos problemáticos, y mucho menos las fuerzas de seguridad”, afirmó Orciani.
El programa de narcotest se aplica tanto a la Policía de Santa Fe como al Servicio Penitenciario.
Avances del programa y protocolo
Este programa comenzó en julio pasado, siendo el gobernador Maximiliano Pullaro y el ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, los primeros en someterse a las pruebas.
Según el Ministerio, a la fecha “hemos cubierto la totalidad de los empleados de carácter político del Ministerio y casi toda la plana mayor de la Policía y el Servicio Penitenciario”.
Orciani explicó que, en caso de detectarse un resultado positivo, se aplican medidas diferenciadas. “Si se trata de un integrante de la conducción, se tomarán las medidas necesarias; si no es así, se dará un abordaje desde la salud, con una mirada integral”, detalló.
Los controles continuarán ahora con las policías especiales y el resto del personal operativo, además de un relevamiento general sobre consumos problemáticos.

