Uno de los sicarios más sangrietos del Cartel de Medellín y mano derecha de Pablo Escobar, Jhon Jairo Velásquez Vázquez, más conocido como "Popeye", falleció esta mañana en Bogotá a causa de un cáncer gástrico.
El ex líder de sicarios del Cartel de Medellín, de 57 años, estaba en el Instituto Nacional de Cancerología de Bogotá, donde la habían practicado una gastrostomía debido a un avanzado cáncer gástrico que lo aquejaba, informó el diario El Espectador.
Desde el 23 de diciembre pasado el asesino preferido de Escobar estaba internado en un hospital en Valledupar, ya que su estado de salud requería de atención especializada.
"Popeye", quien en la serie sobre Escobar de mayor éxito en Argentina, "El Patrón del Mal", le cambiaron el apodo por el de "Marino", estuvo 23 años preso acusado de ser autor de cientos de asesinatos.
El sicario preferido de Escobar aparece en numerosas fotos al lado del líder del Cartel de Medellín y sus lugartenientes.
Las fotos más conocidas son en las que se los ve retratados a Popeye, otros sicarios y Escobar, en la cárcel "La Catedral", que el líder narco se hizo construir para cumplir una condena pero que transformó en un hotel 5 estrellas.
Velásquez Vásquez fue detenido en detenido en 1991 y se lo acusó de alrededor de 300 asesinatos ordenados por Escobar.
Luego de 23 años de prisión, en agosto de 2014, logró salir de la cárcel de Bogotá donde estaba detenido, asegurando que estaba arrepentido de los crímenes.
A partir de ese momento, pese a su condición de asesino sangriento, se convirtió en una estrella de las redes sociales y un centro de atención para los turistas que visitan a diario al ciudad de Medellín.
Su cuenta de youtube (POPEYE_Arrepentido) tiene 1.210.000 suscriptores y millones de personas vieron sus videos, algunos de sus posteos tienen más de dos millones de vistas.
Su página de facebook (Popeyeleyenda) tiene casi 500 mil Me Gusta y en Twitter superó largamente los 80 mil seguidores.
En noviembre del año pasado envió el último mensaje a través de sus redes sociales, en el que agradecía a sus seguidores y sentenciaba: "estoy en manos de Dios".
El diario El Espectador detalla que a pesar de haber salido de prisión bajo libertad condicional, Popeye siguió generando polémica.
Hasta el último día mantuvo que admiraba a Pablo Escobar, el narcoterrorista más tenebroso de la historia de la humanidad.
En el año 2018 fue denunciado por extorsión, lo volvieron a detener y ya no volvió a salir de la cárcel, salvo para la atención hospitalaria.
Fuente: NA