Carlos Abraham, presidente la Asociación de Clínicas y Sanatorios, fue entrevistado en Par de Ases sobre lo que ocurre respecto a la pandemia del coronavirus la retracción en la asistencia a efectores privados de salud y sostuvo que "lo que está sucediendo en todo el mundo tiene que ver, fundamentalmente, con el miedo, a lo desconocido y el mas ancestral que es a la muerte. En el mundo moderno en que apoyamos más nuestras creencias en la ciencia que en la mística, antes el ser humano pensaba en dios. Aparece este virus que pone al mundo de rodillas, por el miedo, porque desde el punto de vista médico no tiene más letalidad que otras enfermedades, entonces se ha desatado el miedo a lo desconocido, a la muerte, que nos tiene en esta situación de no saber qué hacer".
Al ser consultado sobre si esta subutilización es por miedo o por un criterio conservador del área sanitaria de no ocupar por si la curva asciende, Abraham indicó que "en el mes de marzo hubo un consejo de parte de las autoridades sanitarias de que se preservaran las camas en el caso de que aumente la demanda si no éramos capaces de cumplir con la norma básica del distanciamiento social, la cuarentena, que a un mes y medio o dos del primer caso en Argentina no sucedió. No hizo falta utilizar capacidad instalada adicional porque el aislamiento social funcionó y ha puesto a la Argentina en uno de los países con menos fallecimientos del mundo". "Los consultorios médicos están vacíos porque la gente no viene", agregó.
Sobre si el aislamiento pone en crisis el funcionamiento de sanatorios, afirmó que "es muy preocupante porque trabajamos al 30%, esta semana en un 50%. El sistema de financiamiento de la salud viene demorado, por lo que recién recibimos el trabajo que hicimos en diciembre o enero. Pero en algún momento va a llegar el aumento del número de casos y nos va a encontrar desfinanciados cuando lleguen, pero no tenemos posibilidad de hacer otra cosa, la gente y los profesionales tienen que vencer ese miedo y eso no es fácil".
