El presidente Alberto Fernández afirmó hoy que "sería muy injusto" con la vicepresidenta, Cristina Kirchner, si dijera que "impone condiciones" en el Gobierno y remarcó que quiere "terminar esa historia negra" de que la ex mandataria lo "reta" con "dos gritos" y le da órdenes.
"Sería muy injusto con Cristina si yo dijera que me impone condiciones. Tenemos muchas miradas en común y tenemos algunas miradas divergentes", sostuvo el mandatario. En diálogo con Radio Con Vos, el jefe de Estado destacó que tiene "un vínculo personal de muchos años con Cristina, que excede inclusive lo político". "Y Cristina tiene una historia política que me excede con creces a mí. Es una persona con mucho peso político. Con Cristina hablo de todos los temas del Gobierno", contó.
Tras insistir en que la idea de intervenir el Grupo Vicentin no surgió de la ex mandataria, Alberto Fernández subrayó: "Quiero terminar y aventar esa historia negra de la Cristina que viene, me reta, me pega dos gritos y me hace hacer lo que yo no quiero hacer. Eso no existe ni yo permitiría que exista".
"No es así. Definitivamente, no es así. Cristina no ha sido una Presidenta más. Ha sido una Presidenta que ha dejado gente que la quiere y gente que no la quiere. Es un personaje muy...
me sale la palabra polémica, tal vez valga, dentro de la política argentina, porque hay sectores que son muy reactivos a ella", indicó.
Y agregó: "Hay una voluntad de demonizar a Cristina, de perjudicar al Gobierno mostrando a Cristina como lo que no es: es una práctica política".
De esta manera, el jefe de Estado volvió a descartar las afirmaciones de algunos sectores de la oposición que afirman que la actual titular del Senado tiene una alta injerencia en las decisiones del Gobierno del Frente de Todos.
Fuente: NA