Por Juan Trento
El domingo después de las 18 en la plaza central del barrio El Pozo dos policías de la Brigada Motorizada de la Policía de Acción Táctica PAT que intentaron disuadir a un motociclistas que llevaba a una mujer de acompañante y practicaban temerarias destrezas con el vehículo, terminaron siendo agredidos a golpes y a uno de ellos le robaron el arma reglamentaria cargada. Luego, se sumaron al procedimiento, oficiales y suboficiales de la Comisaría 25° y del Grupo de Operaciones Especiales GOE, que lograron aprehender a dos de los agresores, que son hermanos entre sí, G. B. de 34 años, y C. D. B. de 35, y recuperaron el arma reglamentaria y la handy de comunicaciones robadas. Fiscal en turno MPA. ordenó que permanezcan aprehendidos y comunicados e les imputó graves delitos "resistencia a la autoridad, lesiones y robo calificado".
Denuncia
Un llamado telefónico a la central de emergencias 911 hecho por vecinos del barrio El Pozo puso en alerta a los policías de la Comisaría 25° y de la Brigada Motorizada de la Policía de Acción Táctica PAT, sobre la peligrosas maniobras hechas en una moto tipo enduro por una pareja de novios en la plaza central del barrio El Pozo. El operador pidió a los policías una urgente verificación del suceso, y cuando los oficiales de la Brigada Motorizada llegaron al lugar, el motociclista huyó y fue perseguido por los policías, que los alcanzaron en la manzana N° 3.
Golpiza feroz
Pero cuando los policías bajaron de sus motocicletas, fueron agredidos primero por el motociclista en cuestión y luego lo hicieron un grupo de 10 personas, entre ellas varias mujeres. Uno de los policías -F. J.- aparte de los golpes recibidos, sufrió el robo de su arma reglamentaria y el handy de la radiofrecuencia durante el ataque masivo. Aunque, su compañero, al ver la situación completamente desbordada por el número de agresores, alcanzó a usar su sistema de comunicaciones y pidió apoyo urgente a la central de emergencias 911.
Agresores aprehendidos
El policía que logró comunicarse con la central de emergencias 911, no solo sufrió las agresiones, sino que vio cuando el delincuente que robó el arma de su compañero policía y la handy ingresó corriendo al interior de una vivienda. Luego, llegaron en apoyo, policías de la Comisaría 25° de barrio El Pozo y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) arribaron al lugar, y el agresor que robó el arma reglamentaria y la handy del policía, huye e ingresa a otra vivienda. Es perseguido y aprehendido, y luego de una requisa dentro del inmueble, y en el exterior, en el patio de una casa vecina deshabitada, fue secuestrada la pistola calibre 9 milímetro -arma reglamentaria provista al policía- y la handy de comunicaciones. Alli, en la vivienda N° 38 de la manzana N° 3, aprehendieron a G. B. de 34 años, y posteriormente a su hermano, C. D. B. de 35. Ambos presos fueron sacados del barrio El Pozo y trasladados a una comisaría capitalina.
Policías heridos
Los dos suboficiales heridos durante el procedimiento, J. P. y F. J. fueron trasladados a una división de Medicina Legal ubicada en el primer piso de la Comisaría 1° de Santa Fe, donde fueron revisados por un profesional que constató politraumatismos severos como consecuencia de la golpiza a la que fueron sometidos durante el procedimiento.
Peritajes criminalísticos
Informaron la novedad sobre el suceso a la Jefatura de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe, y éstos hicieron lo propío con el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, Ignacio Lascurain, que ordenó que los dos aprehendidos siguieran privados de su libertad, que sean identificados y que se les forme causa por los siguientes delitos: al de 34 años, "resistencia a la autoridad, lesiones, robo calificado y portación ilegítima de arma de guerra", y a su hermano de 35, por los delitos de "resistencia a la autoridad, lesiones y robo calificado". Que el arma reglamentaria de guerra del policía que fuera robada y secuestrada posteriormente como la motocicleta incautada, quedaran con cadena de custodia, y sean sometidos a los peritajes criminalísticos de rigor.
