El equipo dirigido por Lionel Scaloni sintió la ausencia de Lionel Messi y además jugó condicionado desde la primera parte: a los 30 minutos, Nicolás Otamendi fue expulsado, lo que obligó a la Albiceleste a replegarse y apostar a la resistencia. En el inicio del segundo tiempo, el conjunto local también sufrió una baja, con la roja a Moisés Caicedo, lo que equilibró parcialmente las acciones.
Pese al esfuerzo, Argentina no encontró los caminos para igualar el marcador y se despidió de la clasificación con un traspié. De todas maneras, el balance general es ampliamente positivo: terminó en la primera posición de la tabla con 38 puntos y fue la selección más goleadora del certamen, con 31 tantos en 18 partidos.
Por su parte, Ecuador festejó el triunfo que lo dejó en la segunda colocación con 29 unidades y con la defensa menos vencida de las Eliminatorias, al recibir apenas 5 goles en toda la competencia.


