Esta noche de viernes, dos delincuentes fuertemente armados y disfrazados de policías, llegaron hasta una vivienda ubicada sobre los terrenos fiscales ferroviarios de la localidad de Arocena en el departamento San Jerónimo, dispararon varios balazos y gritaron "Policía, esto es un allanamiento, abran o le tiramos la puerta abajo". Acto seguido, los esposos del matrimonio, ella de 22 años y él de 26, abrieron la puerta y dieron paso a un verdadero calvario que los tuvo como víctimas. Los delincuentes se llevaron los 500 mil pesos en efectivo que hallaron en la vivienda y que eran los ahorros familiares, y escaparon. Las víctimas dijeron que estaban disfrazados con ropas policiales pero que usaban zapatillas negras.
Locura criminal
Una vez que los delincuentes lograron ingresar al interior de la vivienda, los golpearon y maniataron y los amenazaron de muerte, para que les dijeran dónde estaba guardada la plata. Los esposos decidieron salvar sus vidas y les dijeron donde estaba guardado el dinero. Los dos violentos delincuentes se apoderaron de los 500 mil pesos en efectivo y escaparon con rumbo desconocido.
Denuncia
Los vecinos que escucharon los disparos de arma de fuego que utilizaron los ladrones para atemorizar a los esposos e ingresar a la vivienda fueron escuchados por los lugareños de casas vecinas, y éstos denunciaron el suceso a la Policía. Posteriormente llegaron oficiales y suboficiales del tercio de guardia de la Comisaría 13° de Arocena, que dialogaron con las víctimas del robo, y ellos mismos dijeron que los ladrones estaban vestidos como policías pero usaban zapatillas negras, y que no les parecieron policías, sino delincuentes que contaban con información sobre la existencia de ese dinero en la vivienda y fueron víctimas evidentes de una delación.
Peritajes criminalísticos
Informaron la novedad sobre la ocurrencia del asalto violento sobre las víctimas y el testimonio y denuncias de éstas a la Jefatura de la Unidad Regional XV San Jerónimo de la Policía de Santa Fe y éstos hicieron lo propio con el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, que ordenó la realización de los peritajes criminalísticos de rigor y la ubicación de testigos que pudieran aportar información sobre el suceso. Los peritajes fueron realizados por los agentes del área Científica de la Policía de Investigaciones PDI.