El santafesino Horacio Rosatti fue electo ayer como presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación en medio de una feroz interna con Ricardo Lorenzatti, quien pretendía volver a presidir el máximo tribunal y contaba con el apoyo de Elena Highton de Nolasco. Estos últimos no participaron de la votación, por lo que el ex intendente de la ciudad fue votado por Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda, así los enfrentamientos quedaron en evidencia.
Albor Cantard, diputado nacional y ex decano dela Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL, se refirió a esta situación y manifestó que no debería influir en los fallos que la Corte tiene pendientes.
"Hay una Corte que es ecuánime, más allá de las diferencias que por los trascendidos pudo haber al momento de la elección de la presidencia, es una Corte que funciona con ecuanimidad y los últimos fallos de la misma. No podemos poner en duda es que han sido todos suficientemente fundados por juristas de primera línea, esa ecuanimidad de la Corte que no vemos en otros juzgados que pareciera que tienen una mirada pendular de acuerdo a los resultados de las elecciones, es a mi modo de ver muy valorable".
Y agregó que "creo y confío plenamente en que no tiene por qué esto afectar el normal funcionamiento de la Corte, ni mucho menos, la doctrina que la Corte en los diferentes temas ha venido sosteniendo durante los últimos años. No veo esto como un problema de una crisis ni un conflicto insalvable, más allá que al momento de elegir autoridades pudo haber diferentes posiciones. pero me parece que una vez saldado con la elección de ayer, debería entrar todo en un carril de normalidad".
