Más de 30 personas sufrieron ayer por la tarde ataques de palometas en la Costanera Este. Las mordeduras se produjeron mientras se bañaban en la Laguna Setúbal. Las heridas principales se dieron en los pies de las víctimas.
Los ataques se extendieron durante cuatro horas, a pesar de las recomendaciones de los guardavidas que, reiteradamente, les advertían a los bañistas que no ingresaran al agua. 33 personas que no acataron esa orden sufrieron las heridas y debieron recibir primeros auxilios.
Las palometas, presentes en esta época en los ríos y lagunas de nuestra zona, suelen morder los pies y las piernas de los bañistas, confundiendo los movimientos con presas. Pueden generar cortes profundos que requieren atención médica inmediata para prevenir infecciones. Autoridades municipales recalcaron la importancia de respetar las indicaciones de los guardavidas y evitar ingresar al agua si se reportan avistamientos de palometas.