El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó que el caso de un militar capturado en España con 39 kilos de cocaína perjudicó a su país y lamentó que no hubiera sido detenido en Indonesia, donde el narcotráfico se castiga con la pena de muerte.
"Esto está siendo investigado; él echó a perder su vida, enlodó el nombre de instituciones, perjudicó un poco a Brasil, pero esto sucede en cualquier lugar del mundo, en cualquier institución", dijo Bolsonaro tras regresar de Japón, donde participó de la cumbre del Grupo de los 20.
El segundo sargento Manoel Silva Rodrigues fue arrestado el martes pasado en el aeropuerto de Sevilla con 39 kilos de cocaína en su equipaje y quedó preso en esa ciudad.
Silva Rodrigues no viajaba en el mismo avión que Bolsonaro pero pertenecía a la misión de apoyo de la visita del mandatario a Japón.
En la única declaración oficial sobre el tema hasta ahora, el ministro de Defensa, Fernando Azevedo, aseguró que Silva Rodrigues será juzgado "sin condescendencia por la justicia española y por la brasileña".
"Mi gran lamento es que no haya sido en Indonesia", subrayó hoy Bolsonaro, en declaraciones a la agencia noticiosa estatal Brasil, recogidas por EFE.
El mandatario se refirió así al caso del brasileño Marco Archer, ejecutado en Java en 2015 después de haber sido arrestado con 13 kilos de cocaína.
Fuente: Ámbito