El gobierno federal de Brasil decidió reabrir para los próximos 30 días sus fronteras nacionales a los visitantes extranjeros que lleguen en avión.
El texto del decreto, que fue publicado en el Diário Oficial da União, precisa que la restricción de entrada se mantiene en cinco estados: Mato Grosso do Sul, Paraíba, Rondonia, Rio Grande do Sul y Tocantins. Cabe mencionar que las restricciones de acceso a Brasil por vía terrestre o marítima siguen vigentes.
Para entrar al territorio brasileño, además de cumplir con "los requisitos migratorios apropiados para su condición, incluida la de tener una visa de entrada", los turistas extranjeros deberán presentar a la compañía aérea —ya antes de abordar— un seguro médico válido en Brasil durante toda la estancia planificada. En caso contrario, la entrada al país puede ser prohibida.
El decreto anterior, emitido en junio, permitía la entrada vía aérea solo a través de los aeropuertos de Galeão (Río de Janeiro), Brasilia (Distrito Federal), Guarulhos y Viracopos (São Paulo). A través de estas terminales, los pasajeros extranjeros ya podían entrar a Brasil para un corto plazo o con fines de estudio, trabajo, inversión, reunión familiar o actividades artísticas o deportivas.
El gobierno tomó la decisión de abrir las fronteras aéreas para los visitantes de otros países justo el día cuando Brasil registró un récord de contagios, al detectar 72.377 casos positivos en la última jornada.
Según el balance emitido por el Consejo Nacional de Secretarios de Salud (CONASS), fueron confirmadas otras 1.664 muertes por la enfermedad. Con estos datos, la cantidad total de positivos se elevó a 2.553.265, mientras que los decesos acumulados ya son 90.134. Actualmente el país se posiciona en el segundo puesto, detrás de EE.UU., en términos de contagios y muertes por el covid-19.
La apertura de las fronteras aéreas se ha hecho con el propósito de aliviar la "devastada industria turística" de Brasil. Según las estimaciones de la Confederación Nacional del Comercio de Bienes, Servicios y Turismo (CNC), el sector turístico brasileños ya ha perdido unos 122.000 millones de reales (más de 23.600 millones de dólares) debido a la pandemia.
Fuente: AFP