Ayer, un familiar llegó al control del penal llevando un televisor para un interno. Tanto él como el aparato debieron pasar por el examen del Body Scanner y así surgió que dentro de la TV había seis teléfonos celulares en buenas condiciones de funcionamiento.
Caballo de Troya, frustrado
El pariente del preso llegó con el gesto adusto y pretendió que su pose vulnerara al control de los oficiales penitenciarios. Tanto él como el aparato fueron sometido al control del Body Scanner y el resultado es que el visitante no llevaba nada sospechoso en su cuerpo. Así mismo, el viejo televisor contenía seis teléfonos celulares en buenas condiciones de funcionamiento, tres cables de USB y dos auriculares.
Aprehendido
Una vez que la maniobra quedó expuesta por los penitenciarios, informaron la novedad inmediatamente a la dirección del Servicio Penitenciario provincial, que hizo lo propio -también de manera urgente- con el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, Miguel Moreno. Se ordenó que personal policial fuera hasta la penitenciaría y aprehendieron al hombre de 25 años y fuera identificado. Su situación procesal será resuelta durante la jornada de este miércoles.