Esta tarde de lunes, durante el horario de la visita en la cárcel de Las Flores de la capital santafesina, un hermano de Martín Tomás Kunz de 18 años, tomó su lugar quedándose en el penal aprovechando su parecido físico, mientras el detenido por el brutal crimen del chofer de San Javier, Rubén Walesberg, escapaba de la prisión. La resuelta y decidida actuación de oficiales y suboficiales del Servicio Penitenciario provincial, evitó la fuga y puso al descubierto la maniobra.
El ardid
Los parecidos físicos entre el presunto asesino del chofer sanjavierino Rubén Walesberg de 71 años, asesinado a las 13 del viernes 19 de agosto y uno de sus hermanos de edad similar es llamativo. Entonces, a partir de esa situación, ambos presuntamente urdieron la maniobra para que en la tarde de este lunes durante el horario de la visita, el inocente se quedara dentro de la cárcel y el verdadero Martín Tomás Kunz de 18 años, huyera de la cárcel de Las Flores. Ellos imaginaron que para cuando los guardias penitenciarios tomarán nota de lo ocurrido, Tomás ya estaría bien lejos de la ciudad y de la provincia de Santa Fe.
Maniobra descubierta
Pero los guardias penitenciarios, cuentan desde hace 45 días con un modificado relevamiento y doble y hasta triple control de situaciones que evitan evasiones personales o masivas. En función de premisa, y sobre hipótesis de trabajo, la complexión física, la vestimenta y demás elementos personales son debidamente tenidos en cuenta, respecto de los familiares de la visita y los internos que acceden al beneficio. En este caso, el llamativo parecido físico, de uso de indumentaria en cuanto a color y marca, y el extraordinario parecido físico hizo creer a Kunz que podría urdir la maniobra junto a su hermano. La imaginaron y de mutuo acuerdo, pues así como se dio la situación, Martín Tomás Kunz de 18 años intentó salir de la cárcel de Las Flores caminando como su hermano. Pero fue advertido por los penitenciarios que frustraron el cambio, y dejaron al autor del asesinato tras las rejas.
El ataque asesino de Kunz
El 19 de agosto a la una de la tarde el chofer sanjavierino de 71 años bajo junto a unos cadetes a realizar una compra en un local comercial de ruta provincial 1°, cuando fue atacado de una manera artera con un arma blanca por Kunz en el cuello y falleció en el lugar. Luego, Kunz, un ex liceista escapó en la camioneta durante cinco kilómetros, previo agredir a otros cadetes del Liceo Militar General Belgrano, hasta que fue aprehendido por la Policía. Dos días después fue la audiencia imputativa y la de prisión preventiva, donde la abundante cantidad de elementos probatorios incriminantes, desde testimonios hasta el resultado de la necropsia, terminaron en la prisión preventiva que lo llevó a una celda de la cárcel de Las Flores. El hermano inocente quedó preventivamente demorado en la cárcel de Las Flores hasta una decisión judicial sobre su situación personal y penal por la desbaratada maniobra.