Un hombre de 27 años, identificado como Darío Oscar M., alias “Cheche”, fue trasladado este viernes desde la provincia de Córdoba a la ciudad de Rosario, donde quedó alojado en el Complejo Penitenciario Rosario a disposición de la Justicia. El detenido estaba prófugo y tenía una orden de captura vigente por su presunta participación en distintos hechos ocurridos en la ciudad de Cañada de Gómez.
El procedimiento fue realizado por la Policía de Investigaciones (PDI), a través de la Unidad de Capturas de Alto Perfil (UCAP), con la colaboración de equipos tácticos de la Policía de Santa Fe y del Servicio Penitenciario. El traslado se concretó desde la Alcaidía Departamental de Marcos Juárez, en Córdoba, hasta la ciudad santafesina, donde se llevaron adelante los trámites de identificación y actuaciones de rigor.
Posteriormente, el imputado fue derivado a una unidad penitenciaria de Rosario, donde permanecerá detenido hasta que sea llevado a audiencia imputativa. Sobre él pesan causas vinculadas a amenazas y abuso de armas, entre otros hechos que son investigados por la Justicia de Cañada de Gómez.
La detención se había producido el pasado fin de semana en jurisdicción de la localidad cordobesa de General Roca, durante un operativo llevado adelante por personal de la UCAP de la PDI. Según se informó, Darío M. se encontraba prófugo y se desplazaba entre las provincias de Santa Fe y Córdoba.
La detención
De acuerdo con fuentes de la investigación, la captura se concretó el sábado sobre la autopista Rosario–Córdoba, entre las localidades de Tortugas y General Roca, cuando el hombre viajaba como pasajero en un remís. Tras tareas de inteligencia y seguimiento, los agentes interceptaron un vehículo Chevrolet Prisma blanco en el que se trasladaba.
Al momento de la detención, el sospechoso descendió del automóvil e intentó huir a pie hacia una zona de campo, pero fue alcanzado y aprehendido por el personal interviniente. En el procedimiento tomó intervención el fiscal Santiago Tosco, de la Unidad Fiscal de Cañada de Gómez.
La investigación previa incluyó el seguimiento de su entorno familiar y social, y permitió establecer que el hombre cambiaba frecuentemente de lugar para evitar ser localizado. Al momento de su detención, llevaba consigo una suma de dinero cercana a los cuatro millones de pesos.
