Este jueves por la mañana comenzó la colocación de los pilotes que sostendrán la estructura del nuevo puente que conectará las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé. La actividad fue supervisada por el gobernador Maximiliano Pullaro en la cabecera ubicada en la ciudad capital.
Se trata de una etapa estructural clave para la construcción del viaducto, ya que los pilotes conforman la base de apoyo sobre la cual se erigirá toda la estructura. Son de hormigón armado, tienen 33 metros de profundidad y un metro de diámetro, y se colocan directamente en el lecho del río. La provisión está a cargo de la empresa Acindar.
Según precisó el ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, el diseño contempla 136 pilotes, organizados en 42 filas de tres unidades cada 40 metros, más cinco pilotes adicionales en cada cabecera.
Una obra histórica para la región
El nuevo puente constituye una de las obras viales más emblemáticas de la provincia y representa una inversión superior a los $ 39.000 millones, íntegramente financiada por el Gobierno de Santa Fe.
Con una extensión total de 1.324 metros, el viaducto se construirá al sur del actual puente y en forma paralela. Cuando esté finalizado, el nuevo puente se destinará al tránsito en sentido hacia la ciudad de Santa Fe, mientras que el puente actual quedará reservado para el flujo vehicular hacia Santo Tomé. Ambos contarán con dos carriles de circulación.
El proyecto contempla cuatro frentes de trabajo: dos en el cauce del río y su valle de inundación, y otros dos en las cabeceras de ambas ciudades, que se activarán una vez que avancen las tareas sobre el río.
Además, se incluyen renovaciones integrales de las cabeceras, con calzadas de 9,30 metros de ancho, bicisendas, iluminación LED y parquización. En Santa Fe, se demolerá el pavimento actual para dar lugar a dos nuevas calzadas de doble carril con banquinas.
En Santo Tomé, la transformación será profunda: se reorganizará la avenida 7 de Marzo desde calle Maciá hasta la cabecera del puente, con modificaciones en los sentidos de circulación de las calles Mitre y Candioti, y la incorporación de carriles exclusivos para bicicletas y sendas peatonales.
El nuevo puente también contará con barandas, defensas metálicas y un sistema especial de protección contra la erosión, para garantizar no sólo la seguridad vial sino también la durabilidad estructural de la obra.


