El ejército indio alertó a China de las acusaciones de que cinco hombres fueron secuestrados por el Ejército Popular de Liberación (EPL) en una zona cercana a la frontera en disputa, dijo un ministro el domingo, en medio de las crecientes tensiones entre los vecinos con armas nucleares.
La relación entre los gigantes asiáticos se ha deteriorado desde un enfrentamiento en la región de Ladakh (noroeste indio) el 15 de junio en el que murieron 20 soldados indios y un número desconocido de bajas entre los militares chinos. Ahora, la tensión sufre otro foco a más de mil kilómetros, en el extremo noreste de la India, también en la zona del Himalaya.
La policía estatal de Arunachal Pradesh dijo a los medios locales que estaban investigando las afirmaciones hechas en Facebook por un presunto pariente de uno de los hombres que el EPL los había secuestrado.
El Arunachal Times informó el sábado que los hombres estaban cazando cuando supuestamente fueron secuestrados. No fue inmediatamente claro cuando podrían haber desaparecido.
El Ministro de Estado para Asuntos de las Minorías de la India, Kiren Rijiju, quien también es legislador del aislado estado fronterizo de Arunachal Pradesh, dijo que se había activado una línea telefónica de emergencia militar destinada a calmar las tensiones fronterizas por el posible secuestro.
“El ejército indio ya ha enviado un mensaje de línea directa al establecimiento homólogo del Ejército de Liberación Popular en el punto fronterizo de Arunachal Pradesh. Se espera una respuesta”, escribió en el Twitter.
El supuesto incidente se produce en medio de las conversaciones entre el Ministro de Defensa de la India Rajnath Singh y su homólogo chino, el General Wei Fenghe, al marge Singh dijo que tuvieron discusiones “francas” a finales del viernes sobre su disputada frontera del Himalaya y las tensas relaciones entre los dos países más poblados del mundo. Ambos emitieron declaraciones acusándose mutuamente de inflamar el enfrentamiento.
Desde el mortal incidente de junio, la India ha intensificado la presión económica prohibiendo las aplicaciones chinas, bloqueando los productos chinos en los puertos e impidiendo que sus empresas se presenten a las licitaciones.
La India y China entraron en guerra en 1962 por Arunachal Pradesh, una zona fronteriza de importancia estratégica, y las tropas chinas capturaron temporalmente parte del territorio del Himalaya.
La disputa sigue sin resolverse. China reclama unos 90.000 kilómetros cuadrados de la zona, casi todo lo que constituye Arunachal Pradesh.
Fuente: Infobae