El sitio encierra una valiosa colección de obras artísticas e históricas, piezas de arte religioso, retratos e importantes documentos. En este convento de la ciudad de Santa Fe descansan los restos del Brigadier Estanislao López y su esposa. La ordenanza fue impulsada por el concejal justicialista Ignacio Martínez Kerz.
El Concejo Municipal declaró por ordenanza “de interés histórico y artístico” y afectó como parte integrante del Patrimonio Cultural al Convento y Templo de San Francisco. Asimismo incorporó este hito urbano al Registro Especial Municipal, que elabora y mantiene la comisión de Defensa del Patrimonio Cultural de nuestra ciudad.
El texto de la norma votada ordena comunicar la declaración a las entidades nacionales y provinciales con competencia específica en asuntos relacionados al patrimonio cultural y la preservación de monumentos y sitios, y colocar una placa informativa indicando su condición de Patrimonio Cultural Histórico y datos de su construcción.
Antecedentes históricos
Los inicios del convento y templo de San Francisco se ubican en Santa Fe la Vieja. Al trasladarse la ciudad, se mudó también casi en la misma ubicación de la cuadrícula originaria. La fundación del convento, atribuida entonces al Padre Rivadeneira, debió iniciarse en el año 1574, simultáneamente con la de la ciudad.
Hacia 1651 se iniciaron las actividades de la escuela, destinada a la educación de indígenas. El 6 de enero de 1660, se anota el primer bautismo en la nueva ciudad; y el 31 de marzo del mismo año se produce la primera escritura pública y la primera acta de Cabildo el 1º de noviembre de 1661. Pero en el Sitio Viejo continuaron los sepelios y bautismos realizados por los franciscanos por cierto tiempo.
En 1938, durante el gobierno de Manuel de Iriondo (1937–1941) se ordenó desde el gobierno provincial la sistematización del área inmediata a San Francisco, dentro del proyecto del Parque del Sur, respetando las modificaciones que presentaba la fachada.
El 4 de febrero de 1942 se lo declaró Monumento Histórico Nacional por el Decreto 112.765 a iniciativa de la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos, y entre 1949 y 1952 se realizó una segunda restauración, en la cual se reconstruyó el ala norte del convento para instalar el museo.
Cuestión pendiente
“Esta iniciativa responde a una cuestión pendiente que la ciudad de Santa Fe y la Municipalidad tienen para con el Convento y Templo San Francisco dada su importancia histórica, artística, cultural, arquitectónica y religiosa”, explicó Martínez Kerz.
“La historia de este sitio, su relación con la fundación de la ciudad, los elementos y objetos que contienen estos históricos muros justifican ampliamente la necesidad de declarar Patrimonio Cultural Histórico Artístico, tal como lo establece la Ordenanza 10.115, dado que cumple con la antigüedad requerida y demás disposiciones”, concluyó el concejal.