La Dirección de Salud de la Municipalidad de Santa Fe confirmó el inicio de un plan de acción para prevenir la proliferación del dengue de cara a la temporada de verano. Tras un período con baja cantidad de casos, las autoridades enfocan sus esfuerzos en el descacharrado y el monitoreo vectorial, especialmente luego de que se detectara la presencia del mosquito transmisor en distintas zonas de la ciudad.
En una entrevista, la directora de Salud, Lorena Masari, informó a Veo Noticias que, si bien la última temporada fue “relativamente tranquila” con solo 21 casos registrados, el municipio se mantiene en alerta. “Esto no quiere decir que nos quedemos tranquilos, sino que estuvimos trabajando a lo largo del año”, aseguró.
Monitoreo y trampas positivas
El sistema de vigilancia municipal arrojó resultados que motivaron acciones inmediatas. Según detalló Masari, se registró una ovitrampa positiva en barrio Candioti. Además, dos trampas para mosquitos adultos dieron positivo la semana pasada en los barrios Coronel Dorrego y Centro Sur.
Estos hallazgos son clave para direccionar las tareas de prevención. “A partir de ello, empezamos a retomar lo que son los descacharrados en estos barrios donde tenemos la presencia del vector”, explicó la funcionaria.
Cronograma de acciones preventivas
El plan de trabajo se basa en la experiencia del brote de 2023-2024. Las principales acciones incluyen:
Descacharrado: Se comenzará por los barrios con trampas positivas, priorizando Coronel Dorrego, que fue una de las zonas con mayor cantidad de casos en la temporada anterior.
Cementerio Municipal: Se volverán a realizar operativos de limpieza, ya que es considerado “una zona donde hay muchos reservorios y ha quedado en el centro de la ciudad”.
Terminal de Ómnibus: Se realizarán tareas de sensibilización a personas que viajan, especialmente a la zona norte del país y a países limítrofes, donde hay circulación del virus durante todo el año.
Expectativas y vacunación
Consultada sobre qué se espera para este verano, Masari señaló que, debido al comportamiento bianual de la enfermedad, se prevé un leve aumento de casos en comparación con el último año. Sin embargo, aclaró que el comportamiento del vector y de la enfermedad es “dinámico” y depende de factores como las lluvias y el trabajo preventivo.
Finalmente, destacó que la vacunación, impulsada por la provincia, es “una medida más preventiva” destinada a quienes ya tuvieron la enfermedad. No obstante, insistió en que la herramienta principal sigue siendo la eliminación de criaderos: “La medida principal sigue siendo el descacharrado, porque si controlamos el vector, disminuimos el riesgo de la enfermedad”.
