Los docentes universitarios iniciaron este lunes un paro de actividades que se prolongará durante toda la semana, como parte de un plan de lucha para exigir al gobierno nacional una mejora salarial acorde a la inflación y mejores condiciones laborales.
La decisión fue tomada por los sindicatos que representan a los profesores y docentes investigadores en las distintas casas de estudios superiores, que reclaman una recomposición de sus haberes y la actualización de los acuerdos paritarios.
Además, desde el 18 de agosto y hasta el 7 de septiembre, se realizarán paros de 48 horas todas las semanas en días rotativos, promoviendo la unidad de acción con el resto de las entidades gremiales.
En paralelo, CONADU Histórica impulsa la realización de una gran Marcha Federal Universitaria, en coordinación con la comunidad universitaria, buscando definir una fecha para este acto de protesta, que se espera se concrete dentro de la primera quincena de septiembre.
Esta medida implica la suspensión total de clases, exámenes y otras actividades académicas en universidades públicas y privadas, afectando a miles de estudiantes en todo el país.
Los gremios advirtieron que la huelga se mantendrá hasta recibir una propuesta satisfactoria por parte de las autoridades nacionales y no descartan continuar con nuevas medidas si no hay avances en la negociación.
