El pequeño de tres años que fue baleado en la cabeza el pasado domingo continúa internado en la terapia intensiva del Hospital de Niños Orlando Alassia. Según el parte médico difundido por el director del centro de salud, Pablo Ledesma, el paciente fue extubado y lleva 24 horas sin asistencia respiratoria mecánica, lo que representa un signo positivo en su evolución.
No obstante, los profesionales aclararon que el cuadro sigue siendo crítico y que las próximas horas son determinantes para observar la respuesta del niño a los tratamientos. “Hay una leve mejoría, pero debemos ser cautos. El estado es delicado y requiere un seguimiento minuto a minuto”, explicó Ledesma.
El caso generó fuerte conmoción en la ciudad, ya que el menor resultó herido con balines de un aire comprimido mientras jugaba con sus primos. El episodio tuvo lugar el domingo por la tarde, y desde entonces permanece bajo cuidados intensivos, con un equipo médico que monitorea de manera constante su evolución.


