Este mes se produjo uno de los peores registros de la bajante del río Paraná cuando alcanzó los -0,23 metros el día 17, luego se produjeron lluvias que dieron alivio a las altas temperaturas y lograron un leve repunte del río que volvió a estar encima del cero cuando midió 0,1 metro el 23 de enero. Sin embargo, el último registro de Prefectura Naval Argentina da cuenta de una nueva disminución y hoy se ubica en -0,05 en el Puerto local.
Según el último pronóstico del Instituto Nacional del Agua expresa que "no se espera una recuperación en las próximas semanas. Prevalece una condición general de disminución de los caudales entrantes al tramo argentino del río Paraná. Los niveles fluviales continuarán en la franja de aguas bajas. La tendencia climática al 31/mar/2022 es desfavorable".
En el informe, el INA advierte que para el 1 de febrero se estima que el río podría rondar entre -0,40 y 0,15 metros.
Juan Carlos Bertoni, director del organismo nacional, explicó a Veo Noticias que "son precipitaciones que tengan una importancia agronómica, con muy importantes frente a la situación de sequía en los lugares donde han precipitado para mejorar las situaciones de siembra y crecimiento de los cultivos pero no impacta absolutamente para nada en el estado del río Paraná a lo largo de todo el territorio argentino".
Y agregó que "se necesita que las precipitaciones ocurran en el territorio brasilero o más en el norte tanto en la cuenca del río Paraná como en la cuenca del río Paraguay y eso en los últimas semanas no está ocurriendo. Lamentablemente el panorama es desfavorable y no se puede esperar una recuperación inmediata".