El solsticio de verano se produce este 21 de diciembre y señala el inicio oficial de la estación más cálida en la Argentina y en todo el hemisferio sur. Se trata de un fenómeno astronómico que ocurre cuando la Tierra alcanza su máxima inclinación respecto del Sol, lo que genera la mayor duración del día y la menor extensión de la noche en todo el año.
De acuerdo a las mediciones oficiales del Servicio de Hidrografía Naval (SHN), el verano comienza exactamente a las 15:03, en el horario oficial argentino (UTC-3). El momento se determina mediante cálculos astronómicos basados en la posición relativa de la Tierra y el Sol, y puede variar levemente de un año a otro.
Según explicaron desde el organismo, el solsticio se produce cuando el Sol alcanza su máxima declinación hacia el sur, alejándose del ecuador terrestre. Esta inclinación, que es de aproximadamente 23,5 grados, provoca una mayor incidencia de la radiación solar sobre el hemisferio sur y define la extensión máxima del período diurno.
Durante esta jornada, las diferencias en la duración del día se hacen más notorias en las regiones australes del planeta, mientras que en las zonas cercanas al ecuador las variaciones son menos perceptibles. El término “solsticio” proviene del latín solstitium, que significa “sol quieto”, y alude al punto en el que el astro parece detener su desplazamiento en el horizonte antes de invertir su recorrido aparente.
El inicio del verano trae consigo cambios significativos en las condiciones climáticas. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), para esta temporada se esperan temperaturas superiores a los valores promedio, con mayor probabilidad de olas de calor, especialmente en el centro y norte del país.
Ante este escenario, las autoridades sanitarias recomiendan mantener una hidratación adecuada, evitar la exposición solar en las horas de mayor intensidad, utilizar protección solar y prestar especial atención a niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas, considerados grupos de riesgo frente al calor extremo.
El solsticio también coincide con el inicio de la temporada turística, el cierre del ciclo lectivo y las celebraciones de fin de año, factores que modifican la dinámica social y económica en distintos puntos del país.
Tras el solsticio de diciembre, los días comenzarán a acortarse de manera gradual hasta el equinoccio de otoño, previsto para el 20 de marzo de 2026, cuando el día y la noche volverán a tener una duración similar. Mientras tanto, el calendario astronómico prevé otros fenómenos de interés, como eclipses y lluvias de meteoros, que serán seguidos por observatorios y organismos científicos.
