Se dieron a conocer los datos del informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, correspondiente a la semana comprendida entre el 2 y 8 de enero de 2019, que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Se atraviesa en la región un período húmedo, que continuará en la semana hasta el 15 de enero, con precipitaciones con importantes volúmenes.
Las condiciones climáticas y de suelo han frenado la siembra de la soja de segunda; se registran importantes pérdidas en el algodón (unas 7.000 a 7.500 hectáreas con pérdidas totales), especialmente en distritos del departamento 9 de Julio. Asimismo, hay afectación en los arrozales de la costa santafesina. Respecto del maíz de primera, comenzó el picado para autoconsumo.
Los distintos eventos se identificaron por precipitaciones de variadas intensidades, caída de granizo en áreas puntuales y en pequeñas superficies, ráfagas de viento en toda el área de estudio y montos pluviométricos acumulados en el período, entre 50 a 215 mm.
La secuencia de precipitaciones durante el mes de diciembre de 2018 y primera semana de enero de 2019, expresaron las características de un período húmedo, con precipitaciones de intensidades bajas, medias y localmente altas, donde el drenaje interno de los suelos y el escurrimiento superficial fueron evidenciando distintas problemáticas y complejidades del sistema natural presente en toda el área de estudio, con el impacto del hombre sobre los distintos manejos
efectuados.
Los excesos hídricos, particularmente en el departamento Nueve de Julio, centro-sur del distrito Los Saladillos, distritos Santa Margarita, Villa Minetti, San Bernardo y centro-sur del distrito Gato Colorado constituyeron, hasta la fecha, el área con mayor impacto y con consecuencias directas en los sistemas productivos que se desarrollaban en áreas rurales y también en áreas urbanas.
Los perfiles de los suelos se encontraron con muy buena carga de agua y disponibilidad para el período de mayor demanda, un indicador siempre latente y de gran importancia para la campaña agrícola.
Los procesos de siembra para los cultivos de segunda o tardíos, como así también el control de las malezas en los lotes, estuvieron muy condicionados por lo enunciado. El avance fue lento y regulado por las condiciones de la cama de siembra, piso de los lotes y accesibilidad a los mismos.
El avance de malezas y grado de enmalezamiento de parcelas fue favorecido por las condiciones ambientales que reinaron durante la semana.
El 80 % de los cultivares presentaron estado bueno, con lotes muy buenos y el 20 % restantes, todavía manifestó el impacto y los inconvenientes pasados, tales como: sectores de lotes con permanencia de agua, encharcamiento, muerte por asfixia de plantas, irregular stand de plantas y emergencia.
Las actividades de siembra fueron bajas, solo durante dos días soleados, bajo buenas condiciones climáticas, interrumpidas por precipitaciones, que condicionaron la cama de siembra.
No se concretaría la estimación de intención de siembra de unas 550.000 ha, con un incremento del 6,36 % representando unas 35.000 ha más que la campaña anterior.
Los diferentes escenarios mencionados en los últimos dos informes, con consecuencias e impactos de importancia, fueron las realidades que determinarían la imposibilidad del logro de la intención de siembra prevista, siendo el área de mayor influencia, la de los departamentos del norte, fundamentalmente Nueve de Julio, por su superficie y grado de afectación climática.
El movimiento de sembradoras y de equipos en toda el área, estuvo regulado por las precipitaciones irregulares que se manifestaron y condicionaron la cama de siembra, siendo relativamente baja la superficie sembrada.
Las condiciones climáticas que reinaron durante la semana continuaron favoreciendo el desarrollo y llenado de los granos, manteniendo en un 98 %, muy buen estado a excelente y el 2 % restante regular, consecuencia de los grados de impacto de los diferentes eventos ocurridos en los distintos departamentos, como caída de piedras, fuertes ráfagas de viento y puntuales excesos hídricos.
Con variados porcentajes de humedad de grano, pero en general, dentro de lo aceptado a nivel comercial. Se mantuvo lo reflejado en el informe de la semana anterior, en las áreas impactadas en distintos grados por los eventos climáticos, los rendimientos promedios obtenidos fluctuaron entre 9 - 11 - 13 qq/ha.
A las pérdidas confirmadas de 1.000 ha en los primeros estadios, la evolución continuó siendo irregular.
La temperatura en el período favoreció el rápido desarrollo de las variedades alcanzando la floración y posterior llenado de grano.
Los lotes más bajos aledaños al Arroyo Saladillo, con drenaje natural de la cuenca, tuvieron excesiva carga de agua, si bien fueron pocos los días que se regó desde río, las bombas para desagote trabajaron en forma permanente para la evacuación de los excesos hídricos. Las bombas funcionaron a gas-oíl, incrementando así el costo del producto.
El resto de los lotes se encontraron en estado vegetativo (macollaje – principios de encañado) y reproductivo o (diferenciación).
La cosecha comenzaría a principios de febrero en los primeros lotes.
a) Monitoreo, el chequeo de los pimpollos en lotes en floración, a fin de la detección del daño por el picudo;
b) Aplicación de insectisidas, herbicidas y en cierto porcentaje de los lotes, reguladores de crecimiento del cultivo;
c) Seguimiento de los cultivares y observación de daños por orugas.
En el área algodonera oeste, departamento Nueve de Julio, distrito Santa Margarita, centro y sur del distrito Los Saladillos y este del distrito Villa Minetti, ante los excesos hídricos, período húmedo, encharcamiento y anegamientos, la pérdida del cultivo sería total, abarcando aproximadamente unas 7.000 a 7.500 hectáreas, aproximadamente.
Ésta es la situación que se observó en un primer relevamiento, pero se continuaría evaluando, sobre todo los diferentes grados de impacto y los daños colaterales.
Hasta la fecha se observó una situación similar a la campaña anterior, en cuanto a la superficie sembrada.