Este miércoles, en el marco de la causa que investiga el femicidio de Marcela Maydana ocurrido en Recreo hace ocho meses, se llevó adelante en los Tribunales de la ciudad de Santa Fe una audiencia en la que se amplió la imputación a César Pérez, ex pareja de la víctima y único detenido por el hecho. En la misma se hizo saber que se utilizó un arma de fuego para cometer el crimen y no una herramienta de albañilería, como se creyó en un principio.
El abogado querellante Raúl Sánchez Lecumberri manifestó que "la investigación siguió avanzando, surgieron elementos indubitables que hicieron saber que la mecánica fue mediante la utilización de un arma de fuego o no un golpe con un elemento punta roma. Eso está acreditado en el legajo, con lo que era necesario, independientemente de que el delito sigue siendo un femicidio doblemente calificado por haber tenido un vínculo Marcela con este señor, vínculo que se había roto hacía bastante tiempo antes y, evidentemente, él no lo había aceptado; además, está calificado porque el femicidio se da en el marco de un hecho de violencia de género contra una mujer".
Explicó que "había que hacer compatible la versión fáctica, es decir, cómo realmente acontecieron los hechos más allá de que sigue siendo un femicidio doblemente calificado y la pena en el código penal es la misma, que es la prisión perpetua".
"Si arribáramos a un juicio y no fuera compatible cómo se realizó el asesinato serían un problema para la fiscalía, para la querella debe haber una lógica entre cómo se realizó el hecho y su consecuencia. Por eso era necesario realizar esta nueva imputación con la descripción de cómo acontecieron los hechos, que es lo que ocurrió hoy", agregó.
Por último, indicó que no hay fecha de inicio para el juicio pero que "con los elementos que hay no hay otra consecuencia que una condena" para el femicida de Marcela Maydana.
Natalia, hermana de Marcela, sostuvo que "se investigó todo muy rápido, estaban todas las pruebas, faltaba el ADN que demoró y salió positivo. No tiene cómo defenderse, es perpetua y ese es el pedido que haremos hasta el final y que no le den nunca la domiciliaria".
"Estamos enojados porque no nos dejaron entrar a la audiencia, no sabemos por qué, será porque lo cuidan como no cuidaron a mi hermana con la medida de distancia y todo lo que tenía, había hecho denuncias y la siguió acosando hasta que la mató. No nos dejaron entrar a sacarnos las ganas de gritarle asesino en la cara. No vamos a parar hasta que se pudra, nos sacó la mitad de nuestra vida", concluyó.
