Los dos feriados de junio, por la conmemoración de Martín Miguel de Güemes y el Día de la Bandera, volvieron a dinamizar el turismo interno en Argentina, movilizando a un total de 2.162.750 turistas por todo el país. A lo largo de seis días distribuidos en dos fines de semana, los viajeros inyectaron $412.372 millones en las economías regionales, abarcando gastos en alimentos, bebidas, alojamiento, transporte, recreación y compras diversas. La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) celebra 14 años de monitoreo ininterrumpido del sector, ofreciendo una radiografía federal del impacto turístico y comercial.
Si bien las cifras son significativas, este año se observó una caída del 16,6% en la cantidad de viajeros en comparación con los mismos fines de semana del año pasado, que contaron con un día más feriado (siete en total). El gasto total también resultó un 27,9% menor a precios reales, lo que refleja un turista más austero. El principal ajuste se manifestó en la duración de las estadías, que pasaron de un promedio de 2,9 noches en 2024 a 2,2 noches este año, además de recortes en servicios recreativos y compras comerciales.
Un balance federal: El turismo de cercanía y los eventos masivos, claves para sostener la actividad
A pesar del contexto económico que limitó el consumo, la respuesta del turismo de cercanía fue notable. Las 24 provincias argentinas desplegaron una intensa agenda que incluyó festejos patrios, eventos regionales y propuestas para todos los gustos. Desde el turismo rural en Lobos, Buenos Aires, hasta la Fiesta Nacional de la Noche Más Larga en Ushuaia, o el regreso del Turismo Carretera en Misiones, cada destino apostó a fortalecer su oferta.
El informe de CAME destaca que, en lo que va del 2025, ya se contabilizan cinco fines de semana largos que movilizaron a 8,8 millones de turistas, generando un impacto económico estimado en 1.821 millones). Estos datos consolidan a los feriados como una herramienta fundamental para mantener el movimiento turístico y beneficiar a miles de pequeñas y medianas empresas en las economías regionales, incluso en temporadas bajas.
Lo más destacado de los feriados de junio por región:
- Buenos Aires y CABA: La provincia tuvo una agenda variada con fiestas populares y eventos, destacando Mar del Plata con el show de Lali Espósito y Chascomús con una ocupación del 40%. La Ciudad de Buenos Aires vibró con ferias gastronómicas, recitales masivos como el de Los Piojos, y propuestas culturales gratuitas, manteniendo un 70% de los comercios céntricos abiertos.
- Córdoba: Con una ocupación promedio del 70%, destinos de perfil invernal como La Cumbrecita (80%) y Villa Carlos Paz (70%) mostraron un buen desempeño. La provincia valoró la estabilidad de precios y la atracción de sus sierras.
- Litoral (Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Misiones, Santa Fe): Misiones fue uno de los destinos más elegidos, con picos de ocupación del 100% en Posadas por eventos como el Turismo Carretera. Entre Ríos, con un 55% de ocupación, vio en sus termas el gran atractivo. Chaco y Formosa, a pesar del clima, mantuvieron un movimiento moderado. Santa Fe capital y Rosario también tuvieron buenos números, impulsados por el Día de la Bandera y eventos deportivos. Corrientes, por su parte, mostró una baja en el turismo urbano pero un sostenido interés por los Esteros del Iberá.
- Norte (Catamarca, Jujuy, Salta, Santiago del Estero, Tucumán): Catamarca celebró “Vinos y Sabores” con buena afluencia. Jujuy tuvo un movimiento moderado, pero con buena demanda de excursiones a Salinas. Salta, al sumar un feriado provincial, disfrutó de cuatro días de actividad, apostando al turismo regional y de cercanía. Santiago del Estero recibió 50.000 visitantes, destacándose Termas de Río Hondo. Tucumán tuvo buena reserva en San Javier y Yerba Buena, con eventos como “Experiencia Carnaval con Los Tekis”.
- Cuyo (La Rioja, Mendoza, San Juan, San Luis): Mendoza, si bien lejos de sus picos habituales, tuvo un repunte por las primeras nevadas en la cordillera. San Juan vibró con el festival coral internacional “San Juan Canta” y Calingasta con 80% de ocupación. San Luis registró una ocupación moderada, pero con una amplia agenda cultural y deportiva. La Rioja, con el 40% de ocupación, vio sus principales atractivos en Talampaya y Chilecito.
- Patagonia (Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz, Tierra del Fuego): Bariloche (70%) y Las Grutas (60%) en Río Negro mantuvieron un buen nivel, con campañas de promoción invernal. Neuquén, con turismo espontáneo y de cercanía, vio a San Martín de los Andes y Villa La Angostura como referentes. Chubut tuvo una actividad moderada, con Puerto Madryn destacándose por el inicio de la temporada de ballenas. Santa Cruz, con El Calafate y El Chaltén a la cabeza, ofreció sus clásicos glaciares. Tierra del Fuego, especialmente Ushuaia, tuvo una intensa actividad turística por la Fiesta Nacional de la Noche Más Larga. La Pampa, en tanto, mostró un movimiento tranquilo pero constante en sus propuestas de naturaleza y vida rural.
Este balance de CAME subraya que, pese a los desafíos económicos, el turismo interno se mantiene como una actividad vital, adaptándose a las nuevas realidades de consumo y reforzando su papel dinamizador en cada rincón del país.
