El diputado nacional del PRO Fernando Iglesias rechazó hoy las críticas sobre presuntos dichos sexistas y machistas contra la actriz Florencia Peña y habló de una estrategia de "victimización" en los medios para "cambiar el eje de la discusión".
El legislador macrista quedó en el ojo de la tormenta tras sugerir que el año pasado hubieron "visitas sexuales" al presidente Alberto Fernández en la Quinta de Olivos que involucraron a Florencia Peña, Úrsula Vargues y Sofía Pacci.
En diálogo con "Baby en el medio", el programa que conduce Baby Etchecopar por Radio Rivadavia, se hizo eco del pedido de un grupo de diputados del oficialismo para excluirlo de la Cámara de Diputados y señaló que de ese modo el Gobierno busca desviar el foco del "desastre sanitario, económico y educativo que hicieron".
"Está claro que el objetivo es obviamente sacarme del Congreso y no discutir lo que tienen que discutir", afirmó.
Iglesias insistió en que "el Gobierno no tiene cómo explicar que hacían ahí toda esa gente que concurrió, en particular, Florencia Peña, Úrsula Vargues y Sofía Pacci", mientras el resto de la gente se estaba "fundiendo" y "el papá de Solange no podía despedir a la hija que se estaba muriendo de cáncer".
El opositor reiteró que jamás salieron de su boca las palabras "petera" o "puta", que son los términos que utilizó Peña en su descargo mediático.
"La persona que utiliza esas palabras con respecto a ella misma es la que despuésse queja. Yo no dije eso, ella si dijo eso de ella mismo. Lo lamento mucho. Es problema de ella, a mí no me afecta", dijo.
"Esta cosa de victimización... Estoy de acuerdo con el feminismo, me parece muy bien. No estoy de acuerdo con el feminismo trucho que es usado para ocultar la tremenda situación que atraviesa el país y el robo descarado de estos delincuentes", sentenció.
Iglesias aclaró que no acusó a Florencia Peña de nada más allá de "complicidad con esta banda de mafiosos", en alusión a los kirchneristas. .
"Florencia Peña es responsable de haber sido cómplice durante años y años de una situación de robo y persecución. Si le preocupaba tanto la situación de los actores hubiera sido bueno que se ocupara de los actores que no eran kirchneristas y que no encontraban trabajo durante 12 años", sostuvo.
Para Iglesias, "el Gobierno no puede explicar el desastre sanitario, económico y educativo que hicieron y por eso "quiere cambiar el eje de la discusión".
"Es absurdo. He sido muy claro, picante pero respetuoso. No es la casa privada del presidente. Es la residencia del presidente de la República Argentina. Es un edificio tan oficial como la Rosada o el Congreso", explicó.
Por último, evitó polemizar con integrantes de su propio espacio político que lo criticaron por sus dichos presuntamente misóginos y machistas.
"Tengo claro quienes son nuestros enemigos. No están de nuestro lado. Están enfrente. Son una banda de mafiosos y autoritarios. Están destruyendo al país mientras se enriquecen", concluyó.
Fuente: NA