Tras dos suspensiones anteriores, estaba previsto que el juicio comience el pasado lunes pero se volvió a postergar por decisión del Tribunal.
Hoy se dará inicio al debate donde se acusa a Leandro Armelino y Germán Castañeda de 22 años y Alejandro Barrios de 27, como coatures del asesinato de Iván Albarengo en barrio La Lomita.
Los fiscales de Homicidios del Ministerio Público de la Acusación, Jorge Nessier y Cristina Ferraro, había solicitado la pena de prisión perpetua para los tres acusados en la audiencia preliminar. Además, formularon una acusación alternativa, a raíz de la cual solicitarán 30 años de prisión e inhabilitación absoluta para los tres imputados.
El niño fue baleado el 18 de enero de 2016 y murió el viernes 22 luego de estar internado cinco días en el hospital de Niños Orlando Alassia. El hecho ocurrió en inmediaciones de calle Obispo Boneo entre Primer Pasaje y Camino Viejo a Esperanza, del barrio Las Lomitas, en la zona norte de la capital provincial.
Al momento de recibir el disparo que le quitó la vita, la víctima se dirigía a un kiosco ubicado en la intersección de Obispo Boneo y Camino Viejo a Esperanza –a escasos metros de su casa– en el que realizaba tareas de limpieza.
“Los tres detenidos utilizaron armas de fuego para disparar hacia un lugar denominado ‘Vieja Casona’, para lo cual actuaron conjunta y premeditamente”, precisó la fiscal Ferraro. “En ese momento, la víctima pasó por el lugar y fue impactado en su cabeza”, agregó la funcionaria del MPA.
Ferraro también señaló que “por la hora del día en la que se produjo el hecho, los autores debieron tener al menos representación de que podían alcanzar a alguna persona con sus disparos, más aún considerando que en el lugar había varios niños que se reunían para ir hacia la Esquina Encendida”.
“A pesar de que no pudo determinarse cuál de los tres imputados efectuó el disparo que impactó en el niño, los tres portaban armas y las usaron simultáneamente”, señaló la fiscal. En tal sentido, agregó que “en este contexto, resulta un dato menor quién de los tres acertó el disparo mortal, debido a que los tres tuvieron la finalidad dolosa y consensuada de causarle la muerte. El resultado les pertenece y es atribuible a todos ellos en su concierto delictivo, común y colectivo”.
Fuente: Prensa MPA