Un tercio de los franceses comenzaron a aplicar este sábado las nuevas medidas restrictivas para frenar la propagación del coronavirus. A partir de la media noche, 16 departamentos -8 de ellos correspondientes a Paris y sus suburbios- están sometidos a actividades restringidas por un período de cuatro semanas (en principio). Las negociaciones sobre qué tipo de comercio tenían o no que cerrar se prolongaron hasta la noche del viernes. Para escapar a este "verdadero - falso confinamiento" miles de personas de la región parisina hicieron largas filas para poder tomar un tren al tiempo que se registraron cerca de 400 kilómetros de atascos en las carreteras.
Esta vez el gobierno ha modificado muchas reglas. Entre las categorías ahora autorizadas a seguir operando están los que venden flores, semillas, plantas, legumbres, animales de compañía, salones de estética, servicios de reparación y mantenimiento de instrumentos musicales, concesionarios de automóviles, venta de chocolates, entre muchos otros. Bruno Le Maire, ministro de Economía, dijo esta mañana que se tomó en consideración los efectos sobre los sectores donde trabajan muchas personas, como en el automotriz o la agricultura. Con excepción de las librerías, las actividades vinculadas al sector de la cultura así como los cafés y restaurantes seguirán cerrados
El ministerio de Economía estima que el costo de las restricciones y ayudas que se aporten a las empresas será de mil 200 millones de euros, y que la disminución de la actividad económica, notablemente en la región parisina, pulmón de la economía francesa, se traducirá en una pérdida de 0,2% del PIB. Pero se ha mostrado optimista sobre la capacidad de reactivación de la actividad económica antes que concluya el año. "Confirmo que nuestra ambición es alcanzar un crecimiento de 6% (del PIB) en 2021", dijo Le Maire.
Otra es la visión del presidente del Medef, el sindicato patronal de Francia, Geoffroy Roux de Bézieux, quien esta mañana afirmó "el principio del confinamiento parcial de los comercios no funciona, no es en los comercios donde uno se contamina". El representante patronal fue muy crítico con el gobierno al que acusó de "ensañarse contra los comerciantes". El hecho que 90 000 de entre ellos deban cerrar por al menos cuatro semanas “tendrá un costo mayor del que estima el gobierno”, apuntó.
Todos están de acuerdo en una cosa. La cadencia del número de personas vacunadas es lo que permitirá evitar que la situación se prolongue más allá del verano. En vía de mientras otros departamentos podrían sumarse a los 16 afectados por las nuevas restricciones. Uno de los integrantes del "Consejo Científico" que asesora al gobierno sobre la Covid-19 advirtió en las páginas de un periódico francés que "otros departamentos o regiones probablemente deberán entrar en ese tipo de dispositivo en los próximos quince días o en tres semanas. Hemos pasado de un promedio de 20 000 a más de 30 000 contaminados por día", dijo. Si ese cálculo se cumple sería una catástrofe para el gobierno que intenta una "tercera vía" entre el encierro completo o uno con muchas restricciones.
Fuente: RFI