Este jueves antes de la medianoche, policías de guardia de la Comisaría 2° de la ciudad de Santa Fe, detectaron la existencia de un teléfono celular en manos de uno de los tres detenidos en una celda. Un agente exigió la entrega del aparato, y el trío de detenidos se mostró renuente.
Convocaron a oficiales de Cuerpos para la requisa, los presos quemaron colchones, pero fueron doblegados, extinguieron el foco ígneo, y luego a los tres revoltosos los trasladaron a otras dependencias policiales capitalinas.
Requisa y traslado
La resistencia de tres presos alojados en la Comisaría 2° a entregar un teléfono celular, derivó en una requisa generalizada que realizaron los oficiales y suboficiales del Cuerpo Guardia de Infantería CGI, pero los internos quisieron evitar el control policial y les arrojaron todo tipo de objetos contundentes. Los policías no retrocedieron, y entonces los tres detenidos encendieron colchones de poliuretano expandido, generando un foco ígneo altamente tóxico. Los policías ingresaron a la celda, sacaron a los tres presos revoltosos que pusieron en peligro sus vidas, los esposaron en el patio, mientras los bomberos extinguían el fuego, y finalmente los trasladaron a tres distintas dependencias policiales capitalinas. Los tres aprehendidos son J. A., J. A y J. I. y quedó secuestrado el teléfono celular que estaba en poder de uno de ellos.
Informes
Informaron la novedad sobre el violento suceso protagonizado por los tres internos de una de las celdas de la Comisaría 2° y por ese motivo el trabajo policial fue opuesto a evitar la maniobra de evasión a la Jefatura de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe, y éstos hicieron lo propio con la fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, Gabriela Arri, que ordenó un informe completo sobre el suceso, el trabajo policial desplegado como la remisión del teléfono celular secuestrado, como también la revisión médica de los tres detenidos.