Joan Laporta se sentó en el Auditori 1899 acompañado por el vicepresidente económico Eduard Romeu y el abogado especialista en derecho procesal Jaume Campaner para dar detalles de una denuncia resonante sobre la administración del dinero durante las últimas gestiones directivas del Barcelona que tuvieron la presidencia de Josep Maria Bartomeu. El actual mandatario advirtió que ya presentaron una denuncia a la Fiscalía Provincial de Barcelona por posibles delitos y dio detalles de lo que encontró la auditoría que se llevó adelante en las últimas semanas.
El máximo directivo advirtió que se detectaron “operaciones dudosas” y “pagos desmedidos” que obligaron a realizar maniobras de mayor profundidad. “Evidenciaban una conducta desleal con el patrimonio del club y no descartaban que alguien se hubiera enriquecido. Hicimos una denuncia de hechos y nos hemos puesto a disposición de la Fiscalía para facilitar las pruebas que acreditan estos hechos. Lo hemos hecho porque los socios del club tienen el derecho a conocer las actuaciones que llevaron al club a la ruina y porque nosotros no queremos ser cómplices”, aclaró ante los medios.
Al unísono de la conferencia, el club envió un resumen de todo el proceso que se desarrolló centrándose en el inicio con la “due diligencie” que se le encargó a Deloitte: “Se desprenden resultados tan desoladores como una deuda exigible de 1.173 millones de euros, unas pérdidas de 481 millones de euros y un coste salarial superior a un 40% al de los clubs de máximo nivel competitivo”. La entidad advirtió, por entonces, nuevamente que existían movimientos de “dudosa razonabilidad económica” y profundizó con un nuevo informe de la agencia Kroll: “Ofrece como resultado un cuadro de operaciones de palmaria irracionalidad económica. En definitiva, pagos sin causa, pagos con causa falsa o pagos de cuantía desproporcionada”.
Romeu aseguró que hay una deuda de 1.300 millones de euros y puntualizó: “389 millones en salarios diferidos a jugadores, 160 millones en valoraciones de jugadores, 80 millones en litigios que tenemos el convencimiento que no se sentenciarán a favor, 79 millones de los derechos de televisión, 40 millones de abonados, 56 millones con compromisos adquiridos por el Espai Barça. Si queremos ser más claros. Las dos últimas temporadas hemos perdido 600 millones y solo 135 corresponden al efecto Covid”.
El directivo aseguró que apenas llegaron con dos carpetas que eran un “fuego” que contenían la deuda a corto plazo y la falta de liquidez para pagar las fichas de los jugadores, además de un patrimonio negativo de 450 millones: “Dentro de los gastos, la masa salarial está por encima del 40% respecto a nuestros competidores”.
“Es una situación complicada con los jugadores, porque acabas tocando el bolsillo a gente que tiene compromisos firmados. En estos 10 meses, hemos logrado un ahorro de 159 millones en masa salarial. Hubo un momento que la masa salarial era más alta que los ingresos del club. Hemos podido rebajar 27 millones de coste financiero”, destacó en relación a los salarios de la plantilla. Al mismo tiempo, aclaró que se ahorraron hasta el momento 25 millones de euros en “gastos generales”.
El abogado que acompañó a los dos dirigentes también dejó abierta una ventana que podría ser explosiva: “Existe un primer bloque de conductas consistente en la retribución de intermediarios. Las comisiones se sitúan cerca del 5% y se han detectado comisiones del 33%. Hay una empresa que nació solo para facturar del FC Barcelona. Se pagaron 10 millones de comisión después de que se cerrara el fichaje”.
Y agregó: “Hay un segundo bloque con pagos sin justificación: en primer lugar casi dos millones de euros, después medio millón de euros por un contrato, más otros 7 millones por la intermediación en un fichaje. Estos dos bloques encajan en la administración desleal y apropiación indebida. Hay un tercer bloque que podemos resumir como alteración contable. Hubo una distorsión deliberada con la permuta de jugadores, se inflaron mucho los precios de mercado de los jugadores”.
Si bien los detalles que brindaron en la conferencia fueron contundentes, Laporta evitó apuntar contra un directivo en particular de la anterior gestión: “Nosotros queremos esclarecer los hechos. No estamos señalando a nadie. La Fiscalía tiene todos los medios para investigar estos hechos. Destacaría que había un modus operandi recurrente que evitaba los controles internos y los controles estatutarios. Operaciones económicas que no pasaban por el control de la junta. Después la deuda que se creó no pasó por Asamblea. Lo más flagrante son los contratos deportivos y la masa salarial. Este es un tema muy serio. Yo nunca he dicho que se han enriquecido injustamente, lo dice la forensic. Lo que nosotros pensemos sobre si meter mano en la caja es irrelevante”.
El presidente actual agradeció a los futbolistas del club porque lograron reducir en un 159 millones la masa salarial y también habló sobre pagos a periodistas en la anterior gestión: “Se han hecho algunos con causa y otros que tienen un tono dudoso. Si la Fiscalía lo pide, lo explicaremos. Si alguien ha recibido un pago con causa falsa no es el grueso importante”.
Fuente: Infobae