Ariel Máximo "Guille" Cantero, preso en la cárcel federal de Marcos Paz, recibió ayer su sexta condena en cuatro años. Fue sentenciado a 6 años y 8 meses de prisión por coaccionar con un llamado telefónico a un juez penal que le había denegado un traslado desde la cárcel de Rawson, donde estaba en 2016. "Decile al juez que se meta el traslado donde ya sabe y que lo voy a matar", le dijo a una practicante del juzgado que atendió el teléfono y mientras las cámaras del penal ubicado a 1.440 kilómetros al sur de Rosario lo filmaban. Para el fiscal Fernando Dalmau esa intimidación significó traspasar "una barrera" y decantó, años después, en la saga de atentados a balazos a edificios y funcionarios del Poder Judicial.
La secuencia de balaceras no era materia del juicio que concluyó ayer, pero ingresó al debate como parte ineludible del contexto cuando en su alegato de cierre el fiscal recordó que un día antes de la primera audiencia, el jueves pasado, hubo un tiroteo en inmediaciones del Centro de Justicia Penal que dejó a una mujer herida. Una vez conocido el fallo, Dalmau se manifestó "muy conforme" con el veredicto del juez Pablo Pinto que "Guille" escuchó por videoconferencia.
En desacuerdo con la sentencia, el abogado Fausto Yrure adelantó que va a apelar el fallo. Para el defensor, en el mensaje de "Guille" no hubo intención de condicionar al juez porque el traslado de prisión ya había sido rechazado tres días antes. Y consideró que fue "una simple manifestación de enojo o a lo sumo una amenaza simple, delito que estaría prescripto por el tiempo en que tardó en hacerse el juicio".
El juez dio a conocer el fallo pasadas las 13.30 de ayer luego de chequear la presencia de las partes y la conexión digital desde Marcos Paz. "Sí, lo escucho", confirmó "Guille" en la pantalla. Entonces Pinto condenó a Cantero a 6 años y 8 meses de prisión como autor de coacción agravada a un miembro del poder público, figura penal de la que existen escasos precedentes. Además lo declaró reincidente y resolvió informar su decisión a la víctima, el ex juez de Sentencia Edgardo Fertitta.
Los fundamentos del fallo se darán a conocer más adelante, pero en lo esencial convalida el planteo de la Fiscalía, que había pedido una pena de 7 años y medio de prisión.
La de ayer fue la sexta condena que recae sobre Cantero, de 32 años y ya sentenciado por liderar una organización criminal dedicada al rubro narco, la comisión de homicidios y negocios violentos. De confirmarse todas las penas que van de los 2 a los 22 años podría recibir una condena única a 50 años de cárcel, la más alta que acepta el Código Penal Argentino para un concurso real de delitos en su artículo 55.
El líder de la banda de Los Monos siguió la audiencia mediante videoconferencia.
Fuente: La Capital