El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, confirmó la primera víctima mortal del huracán Laura en Louisiana, una niña de 14 años que murió cuando un árbol cayó sobre su casa, mientras los equipos de rescate continúan con las tareas de búsqueda de sobrevivientes que no evacuaron a tiempo la zona.
El hecho ocurrió en la localidad de Leesville, a 160 kilómetros de la costa. Las autoridades remarcaron que el personal de emergencia ha recibido varios informes de fallecimientos pero todavía trabajan en el lugar para confirmar las cifras.
Por ello, Edwards señaló que sólo están empezando a evaluar los daños, mientras que el gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que las evacuaciones permitieron evitar miles de muertes.
Ambos gobernadores dicen que la marejada ciclónica no parece haber sido tan grave como temían. Según indicó Peter Gaynor, administrador de la agencia de emergencias (FEMA), la oleada resultó ser menor de lo que se había pronosticado, pero advirtió que el viento podría haber causado un daño significativo en los edificios de la zona.
Entre otros daños, la policía recibió un informe de que el casino flotante de la Isla de Capri se rompió de su amarre y quedó atascado contra el puente de la Interestatal 10 en Lake Charles. El barco fluvial Grand Palais alberga 34 juegos de mesa y más de 1.175 máquinas tragamonedas.
Se espera que el meteoro, que tocó tierra en Cameron en la madrugada como potente huracán categoría 4, se debilite rápidamente y se degrade a tormenta tropical más tarde en la jornada, aunque pasadas siete horas del golpe en la costa permanecía como categoría 2. Recién en el reporte de las 10 (15 GMT), bajó a categoría 1, con vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora.
El NHC advirtió sobre el aumento de las aguas en su camino hacia el norte, rumbo a Arkansas, a donde debe llegar en la noche. Dijo que una marejada ciclónica “catastrófica” se producía en partes de Luisiana y agregó que sumadas a la marea alta, esa marejada -que se espera penetre unos 65 km tierra adentro- podría causar una crecida de las aguas de entre 4,5 m y 6 m por encima del nivel normal.
“Pasarán varios días después del paso de la tormenta para que las aguas retrocedan”, señaló.
Laura obligó a evacuar a centenares de miles de personas en Luisiana y Texas, estados del sur de Estados Unidos, ante la perspectiva de “catastróficas” crecidas, fuertes vientos y lluvias.
Fuente: Infobae