En Argentina, el uso del bidé forma parte de la higiene personal en la mayoría de los hogares. Sin embargo, una nueva alternativa tecnológica, popular en países como Japón, comienza a llamar la atención por ofrecer una limpieza más cómoda y completa: los inodoros inteligentes con “washlet” integrado.
Estos dispositivos proponen una evolución del baño tradicional, ya que permiten asearse sin necesidad de usar papel higiénico y unificando las funciones del inodoro y el bidé en un solo artefacto.
¿Qué es y cómo funciona un washlet?
Un washlet es, en esencia, un asiento de inodoro electrónico que incorpora un sistema de bidé. Creado por la empresa japonesa TOTO en 1980, este dispositivo funciona como un inodoro convencional pero añade un sistema de limpieza avanzado que utiliza un chorro de agua para la higiene íntima.
Entre sus funciones más destacadas se encuentran:
– Chorro de agua tibia con temperatura y presión regulables.
– Asiento con calefacción.
– Boquilla de agua auto limpiante, que se higieniza antes y después de cada uso.
Algunos modelos más avanzados agregan secado con aire caliente, desodorizador para eliminar olores y una tapa que se abre y cierra de forma automática.
Las ventajas frente al método tradicional
La popularidad de los washlets radica en los beneficios que ofrecen en comparación con el uso de papel higiénico o incluso del bidé tradicional.
En primer lugar, la higiene. El agua proporciona una limpieza más profunda, delicada y efectiva, lo que es ideal para personas con piel sensible o irritaciones. Al no generar la fricción del papel, se asegura un aseo más completo.
Otro punto clave es la sostenibilidad, ya que se reduce drásticamente el uso de papel higiénico. Esto no solo contribuye a disminuir la generación de residuos, sino que también ayuda a prevenir atascos en las cañerías.
Finalmente, el confort es un factor decisivo: la experiencia de usar agua tibia y un asiento calefaccionado es considerablemente más agradable.
¿Ya es una tendencia en Argentina?
Mientras que en países como Japón y China los washlets son un estándar en hogares y espacios públicos, en América Latina comienzan a ganar popularidad, especialmente en proyectos de viviendas nuevas o remodelaciones de alta gama.
Aunque la inversión inicial puede ser elevada, cada vez más usuarios valoran la combinación de mayor higiene, confort y sustentabilidad que ofrecen estos dispositivos, posicionándose como una alternativa que podría transformar los hábitos de higiene en el futuro.


