Este miércoles, jubilados y pensionados de la provincia de Santa Fe llevaron a cabo una nueva “marcha de los banquitos” frente a la Legislatura para visibilizar su crítica situación y reclamar contra las políticas del gobierno provincial. Los manifestantes denuncian que sus derechos son vulnerados tanto a nivel provincial como nacional.
El principal foco del reclamo es la ley previsional provincial, la cual, según los afectados, “mete la mano en la caja de jubilaciones”. Aseguran que la normativa permite al Ejecutivo tomar fondos de los pasivos para cubrir un déficit que antes era compensado por la Nación.
El reclamo por el pago de aumentos
Uno de los puntos más cuestionados por los jubilados es el artículo de la ley que establece un plazo de 60 días para percibir los aumentos acordados en paritarias. “Esos míseros aumentos, porque son míseros, se van a cobrar recién a los 60 días. Cuando llegan, la inflación ya se comió el poder de compra”, explicó uno de los manifestantes.
Además, los jubilados criticaron la falta de diálogo en las negociaciones paritarias. Sostienen que el gobierno “tira una propuesta y, si no se acepta, la aplica por decreto”. Por esta razón, uno de los objetivos centrales de la protesta es lograr la derogación de la ley.
La crítica situación de IAPOS
La protesta también incluyó fuertes críticas hacia la obra social provincial, IAPOS. Los afiliados denunciaron un aumento desmedido en los coseguros y la quita de medicamentos de la cobertura, lo que agrava su situación económica. “Cada día nos están castigando más a los jubilados con el aumento de los coseguros y los medicamentos, que son cada vez más caros”, afirmaron.
El drama de vivir con la jubilación
Durante la manifestación, se compartieron testimonios sobre las dificultades diarias para subsistir. Una jubilada que percibe 560 mil pesos relató que ese monto es insuficiente para cubrir gastos básicos de alimentación, medicamentos, servicios y transporte, especialmente si surge un imprevisto de salud. “¿Cómo paga la luz, el agua, el gas? Quieren ver los cadáveres, y no los están viendo porque la gente se está muriendo en los hospitales”, sentenció con dureza.
A pesar del panorama, los jubilados aseguraron que continuarán con las medidas de fuerza. “Vamos a seguir peleando, vamos a seguir en la calle, vamos a seguir haciéndonos visibles y mostrando que esta situación es inaguantable”, concluyeron, inspirados por movilizaciones similares en otras provincias.
