En un contexto global volátil y con una economía interna que busca consolidar su recuperación, el Índice Compuesto Coincidente de Actividad Económica de Argentina (ICA-ARG) registró en mayo un leve crecimiento del 0,1% mensual, lo que marca un freno respecto al impulso mostrado en otros tramos del año.
En comparación interanual, la actividad mostró un crecimiento del 6% respecto a mayo de 2024, aunque con señales de desaceleración. El informe, elaborado por el Instituto de Coyuntura de la Universidad Nacional del Litoral, destaca que el frágil avance se da en medio de ajustes internos y turbulencias en el escenario internacional, como las tensiones comerciales impulsadas por Estados Unidos.
Indicadores mixtos: el agro empuja, pero la industria y el consumo se debilitan
Durante mayo, cuatro de los diez indicadores que conforman el ICA-ARG tuvieron variaciones mensuales positivas, mientras que los seis restantes mostraron retrocesos. Sin embargo, ocho de diez crecieron en la comparación interanual.
Entre los datos destacados:
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Producción agropecuaria: creció un 7,9% mensual, por el avance de la cosecha de soja, aunque cayó un 3,6% respecto al mismo mes del año anterior.
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Industria: encadenó su tercer mes de caída, con una baja de 0,2% mensual, pero con un crecimiento interanual del 6,3%.
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Construcción: cortó seis meses de subas y cayó 0,9%, aunque creció 11,5% interanual.
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Patentamientos: acumulan 15 meses consecutivos en alza, con una suba mensual de 0,8% y un notable incremento interanual de 72,6%.
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Ventas minoristas: sin variación respecto a abril, aunque con un leve aumento del 2,4% interanual.
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Importaciones: cayeron 1,3% mensual, pero crecieron 35% interanual, en el primer mes completo con el nuevo esquema cambiario.
Trabajo y salarios en retroceso
Uno de los aspectos más preocupantes del informe es la situación del empleo privado registrado, que cayó 0,1% en mayo, sumando su tercera baja mensual consecutiva. En términos interanuales, se registra una retracción del 0,2% y se estima que aún hay 167.000 puestos menos que el pico de agosto de 2023.
Los salarios reales también sufrieron una baja del 0,7% mensual, afectados por el ajuste inflacionario y la pérdida de puestos de trabajo, aunque muestran una mejora del 14,7% interanual.
Indicadores líderes aún en baja
A pesar del leve repunte en la actividad económica, el Índice Líder de Actividad de Argentina (ILA-ARG), que anticipa el rumbo futuro de la economía, cayó 0,2% en mayo, sumando su tercer mes consecutivo en retroceso.
La caída estuvo influida por un fuerte recorte del gasto de capital del Estado nacional, que tocó su segundo nivel más bajo histórico; y los datos negativos en sectores clave que no logran consolidar su recuperación.
Perspectivas: señales débiles y adaptación en curso
Mayo fue el primer mes completo con el nuevo esquema cambiario basado en flotación entre bandas. Aunque el sistema busca estabilizar el mercado, la adecuación aún está en proceso y genera incertidumbre sobre la dinámica futura de sectores claves como la industria y el comercio exterior.
A nivel internacional, el escenario tampoco ayuda: persisten conflictos bélicos, medidas proteccionistas y tensiones comerciales que golpean la confianza global.
En conclusión, el leve crecimiento de mayo no alcanza para revertir el freno económico de los últimos meses. Con una recuperación aún frágil y señales mixtas en varios frentes, el rumbo económico de Argentina dependerá de su capacidad para sostener políticas que reactiven la inversión, el empleo y el consumo en un contexto local y global desafiante.
