La joven de 16 años y su bebé de 11 meses que lograron huir de su cautiverio el martes al mediodía, se encuentran fuera de peligro físico y bajo el cuidado del Estado provincial. La Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia confirmó a Veo Noticias que intervino de manera inmediata en el caso, que revela una historia de cautiverio que se habría extendido por más de cinco años. La madre y su hija fueron trasladadas a un dispositivo de contención y acompañamiento dentro del sistema de Niñez, donde profesionales están abocados a analizar y planificar los pasos a seguir para garantizar su plena recuperación y protección integral. Afortunadamente, los informes iniciales indican que ambas están bien de salud, a pesar de las circunstancias traumáticas que rodearon su rescate.
En paralelo a la contención social, el plano judicial avanza con celeridad. El miércoles, se llevó a cabo un allanamiento clave en la vivienda de barrio El Abasto, lugar donde, según las denuncias, la adolescente habría estado privada de su libertad desde los 11 años. En el procedimiento se detuvo a tres personas, incluyendo a la pareja de la joven. Los reportes señalan que la adolescente era víctima de un prolongado cautiverio, en el que se la habría mantenido encerrada y forzada a ejercer la prostitución.
La investigación del caso está en manos de la fiscal Vivian Galeano, de la Unidad Especial de Género, Familia y Violencia del Ministerio Público de la Acusación. Dada la complejidad y la extrema gravedad de los delitos —que incluyen privación ilegítima de la libertad agravada, y posiblemente, trata de personas y abuso sexual—, la funcionaria judicial solicitó una prórroga para llevar adelante la audiencia imputativa. Este recurso judicial es habitual en causas sensibles, permitiendo a la fiscalía sumar y analizar la totalidad de las pruebas recolectadas en el allanamiento para así formalizar la acusación con mayor solidez contra los tres detenidos.


