La ministra de Salud de la provincia, Sonia Martorano, destacó que si bien la tasa de letalidad del coronavirus en la provincia, y particularmente en Rosario, es elevada "la vamos siguiendo de cerca y aún no es preocupante".
Luego de que Rosario superara este lunes los 1.000 fallecidos por coronavirus -en la provincia desde el inicio de la pandemia son 1.871- la titular de la cartera de Salud santafesina destacó este martes respecto a la tasa de letalidad de la enfermedad que "Argentina subió a 2,7 y a nivel mundial está en 2,4. En la provincia de Santa Fe es de 1,44, en Rosario está aumentando pero todavía no es preocupante. Pero a la evolución la vamos siguiendo de cerca".
Martorano también explicó que la ola de contagios en la provincia va mudando su escenario hacia el centro-norte del territorio santafesino: "Era lo que esperábamos. Cuando veíamos lo que pasaba en el Amba, sabíamos que iba a llegar a Santa Fe. Hay una ruta de comunicación muy fluida que hacía que lo que pasaba allá se replicara aquí".
Por otra parte, destacó que la pandemia "no pasó, pero comienza a estabilizarse en el sur y empieza a subir en el centro norte. Lo vamos manejando" al tiempo que destacó que en caso de que el aumento de casos en esa región complique la ocupación de camas "existe la posibilidad de utilizar las camas de Rosario".
También la funcionaria subrayó que la curva de contagios de coronavirus "se va achatando" y recordó el pico del 20 de octubre pasado, cuando la provincia registró 2.900 casos en un día.
Por otro lado, la ministra aseguró "tener certezas para marzo", respecto a la inoculación de vacunas en Argentina y se mostró poco esperanzada que antes de fin de año esté disponible en el país.
"Certezas hay pocas. El desarrollo de la mayoría de las vacunas está avanzado, y muchas con bastantes buenos resultados, superiores al 90 por ciento de efectividad", destacó para luego aclarar "certezas tengo para marzo, porque esperamos que para esa fecha va a estar la vacuna de AstraZeneca".
Cumplimiento de las medidas sanitarias
Acerca de cómo veía el comportamiento de la sociedad respecto al cumplimiento de las medidas dispuestas para evitar la propagación del coronavirus, Martorano destacó que "con cierta preocupación". Allí comparó la situación del personal de salud y el esfuerzo que realiza en la pandemia: "Están cansados, no salen, están trabajando al límite. Hay muchos compañeros que están dejando la vida. Y después tenemos otra ciudad que pide cada vez más esparcimiento, más actividades económicas. Y en algún punto está bien, pero después tengamos cuidado. Mantengamos la distancia, no hagamos reuniones sociales, es un tiempito más"
Por último, y al ser consultada sobre el reclamo de padres de alumnos de colegios primarios y secundarios que pretenden que sus hijos puedan tener la ceremonia de fin de ciclo, la ministra de Salud se mostró cauta: "Creo que si se logra aplanar la curva epidemiológica para el año que viene se va a poder. A esto hay que sostenerlo entre todos, no queremos que nos pase lo de Europa. Lo de la ceremonia de entrega de diplomas podría hacerse con muchos cuidados y eso es potestad (el ministerio) de Educación. Pero nosotros vamos a dar nuestra opinión. No tengo una fecha estimada de lo que sería la vuelta a clases, pero si seguimos con estos números es factible. Si vamos abriendo actividades, de la mano de esto vamos a tener que ir abriendo cuestiones educativas. En lugares chicos ya se está haciendo. Ahora hay que pensar en qué fechas podría hacerse en ciudades grandes".
Fuente: La Capital
